Fideos chinos con ternera de la Janda

Fideos chinos con ternera de la Janda. Esta semana traigo una receta de estilo oriental, muy sencilla y que se hace en muy poco tiempo. La hago con fideos de arroz o noodles que son fáciles de encontrar y sencillos de cocinar. Además al no contener gluten esta receta es apta para celíacos, siempre y cuando no utilices la salsa Teriyaki y la sustituyas por una salsa de soja sin gulten (la suelen etiquetar como Tamari).

La Ternera de la Janda es una marca de calidad promovida por los criadores y comercializadores de dicha marca. Su objetivo es poner en valor la ternera 100% natural del campo de Vejer, como marca de garantía. Los productores y los carniceros de la zona disponen de un certificado de pertenencia, que lo tendrán expuesto, y les acredita su pertenencia a la asociación.

Esta receta está pensada para dos personas por eso he usado sólo, dos filetes de tapilla, de ternera natural 100 % del campo de Vejer, comprados en mi carnicero de confianza Paco Melero, que como siempre os digo, me aconseja la pieza más adecuada para según qué receta.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de Fideos chinos con ternera de la Janda

  • 200 gr. de fideos de arroz
  • 250 gr. de filetes ternera de la Janda cortados finos (2 filetes)
  • Una (1) cebolla fresca
  • Un (1) pimiento rojo
  • Cuatro (4) setas (champiñones, Shiitake, enoki, …)
  • Dos (2) zanahorias
  • Un (1) diente de ajo
  • Un (1) trozo de Jengibre fresco
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Salsa Teriyaki
  • Sichimi Togarashi o pimienta (opcional)

Elaboración de la receta de Fideos chinos con ternera de la Janda

  1. Como siempre comienza lavando bien las verduras. Pela la cebolla y córtala en juliana (en tiras). El pimiento también lo cortas en tiras o trocitos medianos. Pela la zanahoria y la cortas igual que el pimiento. Y las setas limpias, las laminas. Al corte y tamaño de las verduras en la cocina oriental se le da mucha importancia, por la estética y la cocción.
  2. Corta los filetes de ternera en tiras, más o menos del mismo tamaño que las verduras o un poco más largos. Los pones en un bol y le añades la Salsa Teriyaki. Déjalos marinando.
  3. Pela el diente de ajo y rállalo con un rallador. Ralla también un poco de jengibre.
  4. Pon un wok o sartén con bastante fondo a fuego medio-fuerte. Añade dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra y cuando caliente incorpora la cebolla y el ajo rallado. Al cabo de un par de minutos añade el pimiento y la zanahoria, los salteas otro par de minutos e incorporas las setas. Incorpora el jengibre rallado y sichimi togarachi o la pimienta molida, si te apetece picante.
  5. Mientras salteas la verdura, pon una olla al fuego fuerte con abundante agua y un puñado de sal. Cuando esté hirviendo metes los fideos y retiras la olla del fuego. Deja reposar cuatro (4) minutos. Escurre los fideos y los lavas bajo el grifo con agua fría.
  6. Escurre la carne del marinado y reserva la salsa. Añades a la carne a la sartén y la saltéas un par de minutos e incorpora la salsa teriyaki reservada. Es el momento de añadir los fideos, remover bien y saltear hasta que estén integrados todos los ingredientes y sabores.
¡Sirve inmediatamente y disfruta de este plato oriental!

Curiosidades de la receta de Fideos chinos con ternera

La ternera la he maridado con salsa Teriyaki que es una salsa de origen japonés. Se elabora mezclando, básicamente, salsa de soja, sake, mirin, vinagre de arroz y azúcar, y cociéndolo posteriormente. Esta salsa se suele usar para marinar tanto carnes (sobre todo pollo), como pescados grasos (atún, caballa…). A mi me encanta usarla para salteados de gambas con verduras o marinar pollo para posteriormente empanarlos con panko, cómo en la receta de Nuggets de Pollo con Guacamole.

La salsa teriyaki puedes hacerla con los ingredientes que te he mencionado o comprarla hecha en tu supermercado habitual o en tiendas orientales. Si no la encuentras puedes marinar los filetes en salsa de soja, que no es lo mismo pero te sirve para salir al paso.

Para  cocer los fideos puedes usar caldo de pollo y así darle más sabor al plato. También puedes echarle una pastilla de caldo al agua de cocción. Reserva siempre un poco de caldo para añadir a la sartén, para que los fideos no se te queden apelmazados.

A mí me gusta el toque picante que le da el Sichimi Togarachi, que es una mezcla de especias picantes japonesa. Si no la encuentras puedes ponerle pimienta o chile en polvo. O si no te gusta el picante, con no ponerla es suficiente.

En esta receta he usado champiñones, pero podría haber usado setas shiitake, mas utilizadas en recetas orientales. Tu puedes usar la seta que encuentres o te guste.

Si no encuentras fideos de arroz, puedes usar cualquier otro tipo de fideo chino, ramen, yasisoba o tallarines, como en la receta de Tallarines fritos con marisco y verdura.

Si te ha gustado el plato de gres donde he presentado los fideos chinos, puedes encontrarlo en “Gressierra“, en Chiclana de la Frontera.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

 

Tortilla de patatas

Tortilla de patatas. ¿Cómo hacer una tortilla de patatas? Es una pregunta que muchos se hacen, más de los que nos pensamos. Aunque hay quien sabe hacerla, le gustaría mejorar su técnica o que la tortilla de patata le quedase siempre con la misma textura y aspecto. Pues bien, voy a enseñaros como la hago yo.

Es muy complicado que las tortillas salgan perfectas, lo interesante de esto es hacerlas perfectas para nosotros, darles el punto de jugosidad que nos gusta y disfrutar de ellas. Ni mucho menos mis tortillas son perfectas pero salen como yo quiero que estén, eso es fácil controlando la técnica.

La Tortilla de patatas o tortilla española es una de las recetas más típicas de la cocina española, se encuentran en cualquier hogar, bar o restaurante y hasta grandes cocineros, como José Andrés, tienen su peculiar versión de ella. Mi receta de tortilla de patata la he tomado prestada de mi buen amigo Ximo Carrión (Fentdetutto), que es un pedazo de cocinero, pero mucho mejor persona y hace unas tortillas espectaculares, además de arroces valencianos y otras recetas, no dudéis en visitar su cuidado blog de cocina. Pincha aquí si quieres ver su receta.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de tortilla de patatas

  • 800 gr. de patatas nuevas (tres patatas medianas)
  • Seis (6) huevos (de corral a ser posible)
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal

Elaboración de la receta de tortilla de patatas

  1. Lava muy bien las patatas y las pelas.
  2. Córtalas a lo largo por la mitad y sobre una tabla las laminas. Intenta que queden casi todas del mismo grosor, mas bien finitas, para que se cocinen igual. Las pones en un escurridor  y las vuelves a lavar para quitarles el almidón. Déjalas escurrir bien para eliminar el exceso de agua.
  3. Pon una sartén grande al fuego medio-bajo con abundante aceite de oliva virgen extra y añade las patatas. El aceite debe cubrirlas por completo.
  4. Tapa la sartén para que se pochen bien las patatas. Vigila la cocción y remueve de cuando en cuando para que no se peguen o apelmacen.
  5. Casca los seis (6) huevos en un bol y los bates ligeramente con una pizca de sal, no hace falta que le saques espuma, si te pasas batiendo no queda tan jugosa.
  6. Cuando las patatas estén blanditas las escurres bien para quitarle todo el aceite que puedas. Yo pongo un escurridor o colador sobre un bol que aguante bien el calor y vierto el contenido de la sartén sobre él.
  7. Chafa un poco las patatas, casi como si fuera un puré, y las añades al huevo batido con un poco de sal. Mezcla bien todo y deja reposar al menos quince (15′) minutos. El huevo debe cubrir la patata por completo.
  8. Pon una sartén a fuego medio-bajo con una cucharada de aceite de oliva virgen extra. Déjala calentar bien. Añade el contenido del bol y cocina lentamente hasta que veas que los bordes estén bien cuajados y puedas darle la vuelta.
  9. Ayúdate de un plato llano, más grande que la sartén, píntalo con una gota de aceite de oliva para que no se te pegue, y dale la vuelta a la tortilla con cuidado, con un movimiento rápido y decidido. Vuelve a depositarla en la sartén.
  10. A mí no me gusta darle muchas vueltas a la tortilla, por tanto me aseguro que está bien cuajada y dorada por el lado que le doy la vuelta. Si lo ves necesario vuelve a darle la vuelta para darle el punto de cocción que desees, o dorarla un poco mas
  11. Presiona ligeramente la tortilla para saber si está bien cuajada por dentro. Retírala del fuego.

Déjala reposar unos minutos y ¡a comer!

Curiosidades de la receta de tortilla de patatas

Las patatas deben de ser de calidad, no uses patatas viejas o harinosas. Deben estar prietas al tacto y con buen aspecto exterior, nunca blandas.
Yo uso huevos naturales, de las gallinas de mi padre o de mi suegro. Usa unos buenos huevos frescos, de corral a ser posible. El color amarillo intenso de la tortilla es por ese motivo, porque sólo comen trigo, grano, hierbas e insectos, nada de piensos.

Hay dos creencias sobre la tortilla de patata: La que lleva cebolla o la que no la lleva. Yo soy de los que creo que está buena con lo que le pongas, pero no siempre la hago con cebolla. Pero si tu eres de los que le gustan con ella, elige una cebolla fresca  y la cortas en trocitos pequeños, la pochas y cuando esté bien tierna la añades a la mezcla de patatas y huevo.

Para esta receta necesitarás una buena sartén antiadherente. Te aconsejo que tengas una sartén sólo para hacer tortillas o huevos fritos. Una sartén de calidad, con suelo difusor. Si no tienes una así y piensas que se te puede pegar, calienta la sartén cubriendo el fondo de la misma con sal, cocínala hasta que torne a un color dorado y retírala con un papel de cocina, limpiando bien la superficie. Ya la tienes lista para que no se te pegue la tortilla.

Un truco para saber qué cantidad de patatas y huevos necesitas es, por cada patata grande, dos huevos. Es mejor que te pases con el huevo que quedarte corto y que la tortilla quede seca.

Hay infinidad de variantes en esto de la tortilla de patatas y aceptan casi cualquier ingrediente, desde chorizo hasta cualquier verdura, como ya te enseñé en la Receta de Tortilla de Verduras. Y acompañadas de salsas como mahonesa, alioli, picantes o barbacoa. Existe hasta una ciencia que estudia las tortillas en su amplio sentido. Pepe Monforte sabe mucho de eso y nos lo cuenta en la Licenciatura en Tortillología en Cosas de Comé.

Acompaña la tortilla con un vino rosado, blanco o un espumoso. Yo te recomendaría un espumoso bajo en alcohol, el «Sandara» de Vicente Gandía ó  un espumoso de uva moscatel como «Apiane» de Tierras de Mollina, son perfectos para maridar la tortilla. Puedes encontrarlos en Vinum Populus.

Si te ha gustado el plato de gres donde he presentado la tortilla, puedes encontrarlo en “Gressierra“, en Chiclana de la Frontera.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

 

Ensalada de Pimientos del Piquillo Gaditanos

Ensalada de pimientos de piquillo con mandarina y aguacate. Qué sí, que estamos en unas fechas complicadas, lo sé, que hay que cortarse un poquito para la operación bikini, no te preocupes, yo te ayudo. Esta ensalada no te defraudará, eso sí, la salsa que resulta no la vayas a mojar con pan, que nos conocemos…

Te cuento cómo surgió la idea de esta ensalada: Hace poco, estaba comprando en mi frutería habitual «Manuel Flores», y escuchando a Maru, una de mis encantadoras fruteras, la oí explicar una ensalada que me resultó cuanto menos curiosa. No me lo pensé y me metí de lleno en la conversación para sacar los ingredientes, que con gusto me dieron, y he aquí la versión de esta rica y fresca ensalada.

La principal característica de esta ensalada son los Pimientos del Piquillo Gaditanos, plantados en Paterna (Cádiz) por la empresa «Conservas Cantizano«. Son totalmente naturales, conservados en aceite de oliva virgen extra de la serranía gaditana.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la ensalada de pimientos del piquillo con mandarina y aguacate

  • Un (1) bote de pimientos del piquillo asados
  • Un (1) aguacate
  • Dos (2) mandarinas
  • Una (1) lata pequeña de maíz
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Vinagre de Jerez a la Tintilla de Rota (u otro vinagre de Jerez)
  • Un (1) diente de ajo
  • Sal
  • Pimienta

Elaboración de la receta de Pimientos de piquillo con mandarina y aguacate

  1. Abre el bote de pimientos del piquillo, escúrrelos y reserva el aceite de oliva virgen extra de la conserva. Córtalos en tiras.
  2. Pela las mandarinas y déjalas sin piel. Aprovecha todo el zumo que puede resultar al pelar, escurriendo las pieles. Resérvalo.
  3. Pela el aguacate y córtalo en dados.
  4. En un bote pequeño con tapa, añade el aceite de conserva de los pimientos que tenías reservado, el zumo de mandarina, una cucharada de vinagre de Tintilla de Rota, una pizca de pimienta recién molida, sal, un diente de ajo pelado y partido en tres trozos y media cucharada de aceite de oliva virgen extra. Cierra el bote y agita enérgicamente para emulsionar el aliño.
  5. Dispón en un bol los pimientos, la mandarina pelada, el aguacate y un par de cucharadas de maíz dulce.
  6. Retira los trozos de ajo y rocía con el aliño la ensalada al gusto.

¡Buen provecho!

Curiosidades de la receta de ensalada de pimientos del piquillo con mandarina y aguacate

Si no encuentras los pimientos del piquillo asados gaditanos, usa unos de buena calidad, merece la pena una buena conserva. Fíjate bien en la procedencia de la conserva, algunos productores etiquetan como producto Navarro y luego resulta que los pimientos son de Chile, que no digo que sean malos, pero no me gusta nada que no sean honestos y engañen al consumidor.

Prueba a ponerle unos dados de mango a la ensalada, además de combinar muy bien por su sabor ácido y dulce, le dará color y otra textura más.

Para la vinagreta he usado un vinagre de Jerez a la Tintilla de Rota de Bodegas «El gato» pero si no lo encuentra usa cualquier otro vinagre de Jerez y si te gusta más fuerte añade más vinagre. Si quieres que la vinagreta sea más suave no le pongas ajo, aunque es casi testimonial.

Si te ha gustado el plato de gres donde he presentado la ensalada, puedes encontrarlo en “Gressierra“, en Chiclana de la Frontera.

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Conejo con tomate

Conejo con tomate. El conejo es el ejemplo de carne proteica y económica, ideal para dietas bajas en grasas y como alternativa a otras carnes como el pollo y el pavo. Al ser una carne económica contribuye con ello a que las familias puedan comer sano, bien y variado por ello me parece una estupenda opción a la iniciativa de mi amiga Helena, del blog «Mi Puchero» donde se trata de publicar una  #RecetasSolidariasParaNavidad.

Si quieres saber más sobre esta iniciativa pincha aquí.

Podemos diferenciar en general dos tipos de conejos: Los criados en granja y los silvestres. Los domésticos suelen tener mayor cantidad de grasa, un tono mas rosáceo y mas tiernos que los conejos de campo, que suelen ser de una carne mas prieta.

Para esta receta yo utilicé un conejo de campo y por eso le doy una amplia cocción, sino se nos quedaría la carne demasiado dura e incomestible.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de Conejo con tomate

  • Un (1) conejo
  • Una (1) cebolla
  • Medio (½ )pimiento rojo
  • Medio (½ ) pimiento verde
  • Una (1) zanahoria
  • Cinco o seis (5-6) tomates maduros
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Una (1) ramita de romero
  • Una (1) ramita de tomillo
  • Un (1) manojo de perejil
  • Media (½ ) cucharadita pequeña de orégano
  • Una (1) cucharadita pequeña de azúcar
  • Pimienta negra
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra Gil-Luna

Elaboración de la receta de Conejo con tomate

  1. Limpia y trocea el conejo si no lo ha hecho por ti el carnicero. Unos diez o doce trozos será suficiente. Salpimenta los trozos.
  2. Pon una olla a fuego medio con dos o tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Cuando esté caliente sofríe los trozos de conejo por tandas hasta que esté bien dorado y lo reservas.
  3. Pica la cebolla y el ajo en trocitos muy pequeños (brunoise), haz lo mismo con los pimientos y la zanahoria. Ralla el tomate.
  4. En la misma olla donde has dorado el conejo echa el ajo y antes de que se dore añade la cebolla, déjala pochar a fuego lento. cuando esté bien pochada añade los pimiento y la zanahoria troceada.
  5. Una vez esté la verdura blanda incorpora el conejo, el tomate rallado, la cucharadita de azúcar, el romero, el tomillo, el laurel, el perejil, rectifica de sal y añade un poco de pimienta recién molida.
  6. Espolvorea un poco más de perejil picado y deja cocinar durante al menos un cuarto de hora (15′) moviendo de vez en cuando para que no se pegue.
Sirve caliente y con un buen pan de miga.

Curiosidades de la receta de Conejo con tomate

Ten en cuenta que si usas conejo silvestre deberás ampliar el tiempo de cocción. Puedes usar una olla exprés para que te quede bien tierno pero extrema la precaución para que no se te pegue, añade caldo o agua suficiente.

Es muy importante el dorar la carne ya que al hacerlo sellas la superficie y ayudas a que después queden más jugosas, además de que los restos que quedan en el fondo de la olla hacen que al contacto con los líquidos de las verduras formen un glaseado que es la esencia y el sabor peculiar del guiso.

Puedes usar unos farcellets en vez de añadir las ramitas de especias, son muy apañados aunque no se encuentran en todos sitios. Estos me los envió mi amiga Marycosas, una catalana con mucho arte.

Si ves que se te puede pegar añade un poco de caldo o agua. Prueba y corrige de sal cuando reduzca.

Cuando usas tomate natural has de añadir un poco de azúcar para contrarestar la acidez. Puedes usar un tomate natural triturado de calidad si te gusta mas o usar un tomate frito casero que tengas hecho y así acortar el tiempo de cocción.

Para acompañar este arroz viene ideal un poco de quinoa cocida, arroz en blanco o patatas panaderas.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Carne al toro

Carne al toro. Ternera guisada en salsa. Esta receta es de un guiso de ternera, receta típica gaditana, no hay venta que se precie sin un buen plato de este tradicional estofado de carne que tanto se ha extendido por la provincia de Cádiz.

La denominación de esta receta tiene su origen en la carne de los toros de lidia provenientes de las corridas, que al ser una carne muy dura necesitaba una cocción prolongada, hoy día se suele hacer con ternera y su nombre se utiliza como una forma de cocinar la carne, con verduras, especias y vino.

En cada casa se hace de forma diferente, con más o menos especias, con vino fino o con tinto, así es como yo siempre la he hecho. Atiende bien y no te pierdas las curiosidades donde te doy los todos los detalles de la receta y sus trucos.

 ¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de carne «al toro»

  • Un (1) kg. de carne de ternera
  • Una (1) cebolla
  • Un (1) pimiento rojo
  • Un (1) pimiento verde
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Dos (2) zanahorias
  • Tres (3) tomates (o un bote de tomate triturado)
  • 250 ml. de vino tinto
  • 100 ml. de aceite de oliva virgen extra Gil-Luna
  • Sal

Especies reunidas para carne al toro o especias de caracoles*

  • Una hoja de laurel 
  • Una (1) cucharada pequeña de pimentón dulce
  • La punta de la cuchara de pimentón picante
  • Una (1) guindilla
  • La punta de la cuchara de comino
  • Media (1/2) cucharada pequeña de orégano seco
  • Unos granos de pimienta negra
  • Un (1) clavo de olor

Elaboración de la receta de carne al toro

  1. Lava muy bien la verdura, pela la cebolla, la zanahoria y los ajos. Ralla los tomates y resérvalos en un bol.
  2. Pica los ajos, la cebolla, los pimientos rojo y verde, y las zanahorias, a mi me gusta en trocitos muy pequeños para que la salsa quede bien espesa y a la vez suave sin tener que triturar.
  3. Trocea la carne de ternera si el carnicero no lo ha hecho por ti  límpiala bien de nervios, grasas y telillas.
  4. Pon una olla a fuego medio cubriendo el fondo con aceite de oliva virgen extra, cuando el aceite esté caliente añade la carne y dórala por todos los lados. Sería conveniente que la fueses haciendo en pequeñas tandas para que se dore y no se cueza. Si ves que empieza a soltar agua o tienes el fuego muy bajo o demasiada cantidad de carne. Retira la carne de la olla una vez dorada y resérvala.
  5. En la misma olla echa otro poco de aceite de oliva, añade el ajo picado y sofríelo un minuto, antes de que empiece a dorar incorpora la cebolla, póchala bien bajando un poco el fuego. Cuando empiece a ablandar añade el pimiento y la zanahoria. Deja cocinar hasta que esté bien pochada la verdura.
  6. Añade de nuevo la carne de ternera junto con un poco de sal y todas las especias: la hoja de laurel, el pimentón dulce y picante, la guindilla, el comino, el orégano, la pimienta negra y el clavo de olor. Remueve bien para que se mezcle todo.
  7. Incorpora el vino tinto y deja reducir a fuego bajo. Cuando reduzca añade el tomate rallado, cocina unos minutos y cubre la carne con agua.
  8. Deja cocinar al menos una hora u hora y media a fuego bajo con la tapa puesta, removiendo de vez en cuando para que no se te pegue. Si ves que se queda sin líquidos puedes añadir un poco más de agua. Puede que tengas que corregir de sal.

¡ Fríe unas patatas y a comer!

Curiosidades de la receta de carne al toro

La carne de novillo o de jarrete de ternera es ideal para hacer esta receta pero cualquier otra parte te puede servir para hacer este guiso. Yo compro la carne en la Carnicería de mi amigo Paco Melero, en Vejer de la frontera, que me aconseja y me busca la mejor pieza para cada receta. Si quieres puedes hacer esta receta con carrillada, cerdo o costilla, también saldrá muy buena.
 
*Las especias reunidas para carne al toro o especias de caracoles suelen venderlas ya hechas en muchos mercados o tiendas de especias. Si quieres puedes añadir una cucharada colmada de esta mezcla de especias y evitarte el tener todas las especias que nombro en casa. A mí me gusta echar las especias enteras pero puedes molerlas en el mortero o almirez para no encontrártelas en el guiso.

Suelo usar verdura fresca pero reconozco que no todo el mundo tiene tiempo para cocinar por ello si quieres puedes usar en vez de tomates, un bote de tomate triturado o si vas mas allá un bote de tomate frito, siempre que sea de muy buena calidad, no un brick barato.

Si quieres puedes usar una olla exprés u olla rápida, cerrarla cuando añadas el agua unos cuarenta (40′) minutos y tendrás lista tu carne al toro y no te llevará tanto tiempo la elaboración de la receta.

El vino debería de ser un buen tinto con el que te tomases una copa después saboreando el plato. Yo he usado uno de aquí de Chiclana, Un Tinto de Roble de Miguel Aragón, de la Bodega Sanatorio.

Esta receta es 100% sin gluten y por lo tanto apta para Celíacos, de todos modos nunca está de más el comprobar los envases de los productos que utilices y cerciorarte que están libres de gluten, aunque la mayoría de fabricantes ya se van concienciando y se preocupan de informarnos.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

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Puchero Gaditano. Caldo de puchero.

Puchero Gaditano o Puchero Andalúz. Caldo de Puchero. Para comenzar bien el año que menos que hacerlo comiendo bien y con una comida tan típica en Cádiz, «El Puchero», que en otros lugares se les llama Cocido, como el tradicional Cocido Madrileño, haciendo referencia en todos al recipiente donde se cuece.

Esta receta es la base de otras muchas, si sabes hacer un buen puchero tendrás  un buen trecho ganado en la cocina, así es como yo la suelo hacer, casi siempre la hago igual pero a veces cambio o modifico algún ingrediente según el mercado o capricho, pero en líneas generales mantengo la base que es la que os voy a enseñar.

Hace ya mucho tiempo que tenía ganas de publicar esta receta junto con otras muchas recetas de aprovechamiento como la ropavieja, las croquetas de puchero, el cuscús de pringá, el sándwich de pollo (chanwi en Cádiz) que iré publicando y podréis aprovechar al máximo este cocido ya que la economía no está para chistes.

Aquí en Cádiz se suele comer el caldo con las verduras y garbanzos y después las carnes a las que se les llama «Pringá del cocido» y se comen pringando pan en ellas.

El puchero tiene poco misterio así que ¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de puchero gaditano

  • Un (1) buen trozo de Jarrete de ternera (morcillo) 
  • Medio (1/2) pollo o gallina
  • 400 gr. de garbanzos
  • Un (1) trozo de tocino
  • Un (1) trozo de papada de cerdo
  • Un (1) trozo de tocino «añejo»
  • Un (1) hueso de espinazo
  • Un (1) trozo de costilla salada
  • Un (1) hueso blanco salado (hueso de pata de ternera)
  • Un (1) hueso de jamón serrano
  • Un (1) puerro
  • Dos (2) zanahorias
  • Dos (2) pencas de apio
  • Dos (2) patatas
  • Un (1) nabo (yo no suelo echárselo)
Para el caldo de puchero
  • arroz o fideos
  • unas hojas de hierbabuena
  • huevo cocido (opcional)
  • taquitos de jamón serrano

Elaboración de la receta de Puchero

  1. Lo primero es poner a remojo los garbanzos el día anterior. Ponlos en un bol cubiertos con agua fría, del grifo vamos. Hay quien le echa un puñado de sal, yo no suelo hacerlo.
  2. Lava muy bien todos los ingredientes en especial los salados y así quitarles el exceso de sal pues traen bastante.
  3. Lava y pela la zanahoria, el puerro, el apio y el nabo. Trocea la zanahoria y el puerro en dos, el nabo en cuartos y el apio en trozos mas o menos grandes.
  4. Pon una olla o puchero casi lleno a fuego vivo (mas o menos 3 litros). Añade el jarrete de  ternera, el pollo, el tocino, la papada, el añejo, el espinazo, el hueso jamón, la costilla salada y el hueso blanco.
  5. Cuando empiece a hervir echa los garbanzos y las verduras.
  6. Mientras hierve puede que salga espuma, que deberás retirar con un cazo o espumadera.
  7. Cuando no salga espuma, deja cocer semi tapado a fuego medio unas dos (2h.) o dos horas y media (2h30′). Vigila de vez en cuando y retira las verduras una vez veas que están tiernas. Sigue cociendo hasta que los garbanzos estén tiernos.
  8. Una vez esté listo el puchero retira las carnes en una bandeja. Puedes desechar el hueso de espinazo, el añejo y el hueso blanco. Cuando se enfríe procede a desmenuzar el pollo, el jamón y si quieres la costilla salada. Cuidado con los huesos pequeños o punzantes.
  9. Cuela el caldo y resérvalo. Haz lo mismo con los garbanzos. Ya está listo el PucheroRectifica de sal el caldo si  ves que es necesario, pues no se añade sal al llevar los huesos salados.
  10. Para hacer el caldo de puchero: Pon caldo en un cazo (depende de los comensales) añade garbanzos si quieres y cuando empiece a hervir echa unos puñados de fideos o arroz. Cuando estén tiernos puedes poner un poco de carne del cocido y algo de verdura o unos trozos de jamón y huevo cocido.
  11. La «pringá» preséntala en una bandeja para que cada cual se sirva a su gusto.

¡Prepara pan para la pringá y unas hojas de hierbabuena!

Curiosidades de la receta de Puchero gaditano

Los ingredientes de calidad definen a esta receta por tanto no te la juegues con cualquier carne, dile a tu carnicero que te ponga jarrete de ternera, un buen trozo, así tendrás para hacer croquetas de puchero u otra receta de aprovechamiento.

El tocino, la papada y el jamón si son ibéricos mejor que mejor, esto no hay ni que decirlo, te saldrá una pringá de categoría.

El Puchero en olla exprés es lo que tienes que hacer si no tienes mucho tiempo, sólo debes seguir los pasos hasta el punto 6 y cerrar la olla unos cuarenta (40′) minutos desde el momento en que empieza a salir el vapor. Ten la precaución de no llenar la olla mas allá de los tornillos de las asas.

El caldo lo puedes congelar en pequeños botes y sacarlos cuando quieras consumirlos, para una sopa o para utilizarlo como ingrediente de otra receta.

Puedes también hacer con el caldo del puchero un consomé al Jerez añadiendo un poco de fino, añadirle unos picatostes (pan frito) o cuajarle un huevo en el caldo.

Los garbanzos puedes remojarlos y congelarlos, de esta forma no se te olvidará nunca ponerlos en remojo y los tendrás listos para usar, no tendrás ni que descongelarlos.

Con las carnes del puchero ya he comentado que se pueden aprovechar para hacer ropavieja, que se hace añadiendo patatas fritas y un sofrito, Croquetas de puchero, cuscús de pringá, sándwich de pollo, tostadas de pringá, canelones de pringá y otras muchas recetas de aprovechamiento, estad atentos que iré publicándolas.

El hueso de jamón puede dar un color y sabor excesivo a veces, puedes hacer dos cosas, una meterlo en agua la vispera anterior como los garbanzos o quitarle la piel antes de cocinarlo, así suavizará un poco ese fuerte sabor que a veces ocasiona.

Esta receta es 100% sin gluten y por lo tanto apta para Celíacos, de todos modos nunca está de más el comprobar los envases de los productos que vayas a usar y cerciorarte que están libres de gluten, aunque la mayoría de fabricantes ya se van concienciando y se preocupan de informarnos.

Espero que os guste amig@s y Feliz año nuevo!

Si tienes interés en la historia y procedencia del puchero puedes mirar estos artículos: «Del puchero con tos sus avíos» de Julio de la Torre y «Berzas, cocidos y pucheros de Cádiz» de Manuel Ruiz Torres.

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Conejo con cerezas del Jerte

Conejo con cerezas del Jerte. Hace poco mi amiga Lupe me trajo un conejo de campo que su madre, María Santos, le dio para que me regalara, seguramente esta señora hace un conejo guisado de muerte pero yo opté por darle el toque «Ralu» y ver que tenía en el frigo… Vaya! Unas picotas del Jerte! Seguro que casan bien con este lindo conejo.

Precisamente en un corto viaje de trabajo a Extremadura, me regalaron un libro en el que venían representados los alimentos que se producen en esta región de los cuales dí buena cuenta en esta visita, qué mejor que esta receta para rememorar esos momentos.

El conejo tiene una carne blanca, magra y baja en calorías. Es ideal para dietas de control de peso o colesterol siempre que se cocine con poca grasa. Esta carne, si se cocina guisada o estofada es tierna y fácil de masticar sobre todo para niños y adultos con dificultades, aunque has de saber que si proviene de caza suele ser mas dura y por tanto necesitará algo mas de cocción.

La receta la saqué de un libro del cocinero José Andrés, que tanto me gusta y la hace con cerezas pero como lo que yo tenía eran picotas pues eso le puse y el conejo no se quejó, así que al final queda como conejo con picotas del Jerte.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de conejo con cerezas del Jerte

  • Medio (1/2) conejo de campo (1/2 kg. aproximadamente)
  • Un cuarto (1/4) de cucharada pequeña de sal
  • Mezcla de pimientas o pimienta de colores
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Tres (3) cucharadas de aceite de oliva virgen extra Gil-Luna
  • Una (1) Cebolla
  • 18 cerezas o picotas fresca
  • 125 ml. de vino dulce (yo usé moscatel de Chiclana)
  • 250 ml. de caldo de pollo (yo usé caldo de pollo Aneto)
  • Una (1) ramita de canela

Elaboración de la receta de conejo con picotas del Jerte

  1. Corta por la mitad las cerezas y las deshuesas. Resérvalas.
  2. Limpia y lava muy bien el conejo, quítale los plomos que pueda tener (si es conejo de campo) y corta en unos ocho (8) trozos. A mí como me lo limpió y peló María Santos, sólo tuve que trocearlo.
  3. Sala los trozos de conejo y le echas un par de vueltas del molinillo de pimientas.
  4. Pela y corta la cebolla en rodajas muy finas.
  5. Pon una sartén o cazuela a fuego medio-alto con un par de cucharadas de aceite de oliva virgen extra, caliéntalo y dora los trozos de conejo durante cuatro (4′) minutos por cada lado o hasta que esté dorado pero no seco por dentro. Retira el conejo de la sartén y resérvalo.
  6. Baja el fuego y añade otra cucharada de aceite de oliva. Dale un golpe a los dientes de ajo y sin pelarlos los echas en la sartén. Dora los ajos durante un minuto e incorpora la cebolla y seis (6) cerezas. Rehoga la cebolla unos veinte (20′) minutos hasta que caramelice, sin que llegue a quemarse. Si ves que se tuesta demasiado añade una cucharada de agua.
  7. Una vez la cebolla está muy tierna y dorada agrega el vino dulce, sube el fuego y deja reducir un par (2′) de minutos. A continuación incorpora la mitad del caldo de pollo.
  8. Tritura la salsa en el vaso de la batidora (retira la piel del ajo si no quieres encontrarte trocitos desagradables) y de nuevo la echas en la sartén junto con el conejo, la ramita de canela y el resto del caldo. Cuece a fuego lento unos diez (10′) o quince (15′) minutos, dependerá de la dureza de la carne. Prueba de sal y corrige si fuese necesario.
  9. Pasado ese tiempo añade las cerezas restantes y termina de cocer unos cinco (5′) minutos.

Sirve inmediatamente bien calentito junto con unas patatas fritas o un arroz cocido.

Curiosidades de la receta de conejo con picotas del Jerte

Tuve la suerte de que me regalaran este conejo pero siempre puedes hacerlo con cualquier conejo que vendan en el supermercado ya que los hay a muy buen precio. Si compras en el mercado un conejo que proviene de la caza y no de granja, para comprobar que es un conejo joven observarás que la carne es rosada y las patas son flexibles de esta forma te asegurarás de que la pieza es fresca y está en buenas condiciones.

El vino que he utilizado en la receta es un vino Moscatel de Chiclana, amparado por la denominación de origen «Vinos de Chiclana» pero puedes utilizar cualquier otro vino dulce como un moscatel de Chipiona dentro de la denominación de origen Jerez-Xerez-Sherry, un Málaga dulce y hasta un oporto le vendría bien.

Si no te gustan las cerezas, no las encuentras o no están en temporada siempre puedes usar unas uvas, ciruelas o manzana también quedará un guiso estupendo.

El caldo de pollo lo puedes hacer con anterioridad o utilizar un buen caldo de calidad como son los Caldos Aneto  que son 100% naturales además de no contener gluten.

Esta receta es 100% sin gluten y por lo tanto apta para Celíacos, de todos modos nunca está de más el comprobar los envases de los productos que utilices y cerciorarte que están libres de gluten, aunque la mayoría de las marcas como Aneto ya se van preocupando de informarnos.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Calamares rellenos

Calamares rellenos en salsa. Este plato es una de tantas formas como se comen por Cádiz los calamares, concretamente por Conil de la frontera suelen hacerse mucho como bien dice Bartolo, del blog «La cocina de Bartolo» aunque es un clásico en cualquier recetario. El relleno puede ser de lo que que quieras, calamares rellenos de gambas como los hace mi amigo Javi Recetas, carne o la mezcla de ambos, el típico «mar y tierra«, esta versión es con calamar, huevos y jamón.

Es una receta gaditana muy fácil de hacer, no hagáis caso de quien os diga que es laborioso, no es para tanto, hay recetas que te llevan mucho más tiempo y después el resultado no es tan agradecido y si tienes invitados pues puedes tenerla hecha con antelación y sólo tendrás que calentarlos en su salsa antes de servirlos.

Llevaba tiempo queriendo publicar esta receta, aún más después de escuchar a mi padre varias veces que en un bar que suele frecuentar los hacen muy ricos, no he tenido la oportunidad de probarlos pero espero que estos le gusten tanto como los que me comenta.

 ¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de calamares rellenos en salsa

  • Siete (7) calamares de un tamaño mediano
  • Tres (3) huevos (dos de ellos cocidos)
  • Dos (2) cucharadas de pan rallado (sin gluten para los celiacos)
  • Tres (3) lonchas de jamón serrano
  • Un ramillete de perejil
  • Una (1) cebolla
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Una (1) hoja de laurel
  • 125 ml. de vino blanco (yo usé un vino fino)
  • Unas hebras de azafrán (o colorante)
  • aceite de oliva virgen extra
  • Pimienta negra
  • sal

Elaboración de la receta de calamares rellenos en salsa

  1. Limpia muy bien los calamares bajo el grifo, vacíalos, separa las aletas limpias y resérvalas junto a las patas. Este paso es importante pues en el interior pueden tener tierra o restos de otros pescados además de la bolsa de tinta que la puedes guardar si no se te rompe para otras elaboraciones
  2. Da la vuelta a los cuerpos de los calamares, para que el relleno quede compacto, con cuidado que no se partan y límpialos bien de telitas y restos.
  3. Corta un calamar, las patas y aletas en trozos pequeños desechando la zona de los ojos hacia arriba y la boca.
  4. En un bol mezcla los trozos de patas y aletas junto con las dos cucharadas de pan rallado (sin gluten para celíacos), un huevo crudo, el perejil picado, dos huevos cocidos y el jamón cortado en trocitos pequeños, un poco de sal y pimienta. No te pases con la sal que el jamón es sabroso.
  5. Mete la farsa (masa) resultante en una manga pastelera o similar y rellena con cuidado los calamares, puedes utilizar también una bolsa de las que se usan para congelar. Llena tres cuartas partes del calamar para poder cerrarlo bien sin que se salga el relleno o reviente el calamar en la cocción.
  6. Con un palillo de dientes cierra la abertura del calamar para que no salga el relleno. Pincha con un palillo varias veces el cuerpo.
  7. Pica una cebolla en juliana (a tiras) y los dientes de ajo en brunoise (trocitos pequeños).
  8. Pon una sartén o cazuela a fuego medio con el fondo cubierto de aceite, sofríe los ajos y antes de que se doren añade la cebolla y la hoja de laurel. Deja pochar la cebolla hasta que esté bien tierna y en ese momento incorpora los calamares rellenos y las hebras de azafrán que nos dará color y aroma, rehoga unos minutos.
  9. Echa el vino blanco o fino y cuando hierva deja reducir un par de minutos para incorporar caldo de pescado. Baja el fuego y deja cocinar lentamente unos veinte (20′) minutos.

¡Si lo acompañas con patatas fritas triunfas como la coca cola en lata!

 Curiosidades de la receta de calamares rellenos

Los calamares que me gustaría haber utilizado en esta receta son los calamares de potera, es decir los que se pescan aquí en el golfo de Cádiz a mano y no por pesca extractiva pero como no pude comprarlos en el mercado estos son calamares congelados de Mauritania, también muy buenos pero nada comparado con el calamar de aquí.

Corta los calamares en frío para que no se desmenuce el relleno y preséntalos de modo que el relleno se vea y al mismo tiempo absorba la salsa quedando jugoso.

Cuando eches el caldo en la olla y los calamares no quedan cubiertos no te preocupes, los calamares sueltan agua y se cocerán con el caldo y sus jugos.

Si no tienes caldo de pescado casero puedes usar un caldo envasado de calidad como los de Aneto que son 100% naturales ademas de no contener gluten. Si utilizas agua en vez de caldo de pescado puedes añadir media pastilla de caldo de pescado o corregir de sal.

Para acompañar estos calamares rellenos que mejor que unas patatas fritas como ya te he comentado, un arroz blanco o si eres mas atrevido un puré de manzana asada sería una opción estupenda.

Esta receta, a excepción del pan rallado, es 100% sin gluten y por lo tanto apta para Celíacos, de todos modos nunca está de más el comprobar los envases de los productos y cerciorarse que están libres de gluten, aunque la mayoría de las marcas como Aneto ya se van preocupando de informarnos. Hoy día existe pan rallado sin gluten que puedes encontrar tanto en herborísterías como en el «Maradona» o grandes supermercados.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Pinchitos Morunos. Especias para pinchitos.

Pinchitos Morunos. Especias para pinchitos. Con el verano comienza la temporada de barbacoas y… ¿En qué barbacoa no hay unos buenos pinchos morunos? Hay infinidad de formas de hacerlos, cada uno tiene su receta pero esta es la Autentica receta de pinchitos morunos o eso fue lo que quise entender cuando me la enseñaron, bueno supongo que cada uno tendrá su auténtica receta, pero esta os aseguro que es muy buena pues lo realmente auténtico es hacerlo uno mismo y no comprarlos ya aliñados.

Los pinchos morunos son pequeños trozos de carne adobada, ensartada en varillas de metal o madera y cocinados a la brasa, como su nombre indica, son una especialidad marroquí y por ello suelen ser de cordero pero los hemos adaptado a nuestra cultura y lo normal es encontrarlos de pollo, cerdo y hasta de  ternera.

«El secreto de esta receta está en el adobo». En la antigüedad, para conservar las carnes y curarlas se hacía un adobo con especias y así no se estropeaban, de esta forma se cree que fue el inicio de esta tradicional receta tan extendida hoy en día. Este adobo es una mezcla de especias llamada Fulful-bhar, algo parecido al típico Ras-el hanout que se utiliza para los Tajine o al conocido Curry Indio. Como ya he dicho en cada casa se elabora con una mezcla de especias o fulful-bhar diferente, la clave está en la buena armonía de estas como me comentó Juan Ramón del blog «De la vista al paladar«, que fué quien me enseño esta receta en un curso del cual ya he hablado alguna vez.

Cada vez que hago esta receta los olores me transportan a un mágico viaje que hice por Marruecos. Un viaje que se convirtió en toda una aventura al no llevar nada previsto ni reservado, pero que la experiencia que viví, como nos acogieron los amigos que allí conocimos, la forma diferente de viajar y de conocer cosas jamás se me olvidará.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de Pinchitos Morunos

  • Un (1) kg. de carne de cerdo*
  • Una (1) cebolla
  • Un (1) manojo de perejil fresco
  • 50 ml. de aceite de oliva virgen extra Gil-Luna

    * Necesitaras pinchos, brochetas o broquetas para insertar la carne.

Especias para pinchitos (Fulful bhar)

  • 50 gr. de sal
  • 15 gr. de ajo en polvo
  • 12 gr. de cúrcuma
  • 10 gr. de orégano seco
  • 5 gr. de alcaravea
  • 5 gr. de semillas de cilantro
  • 5 gr. de comino
  • 5 gr. de pimienta negra
  • 4 clavos de olor
  • 3 guindillas o cayena
  • 2 gr. de anís

Elaboración de la receta de Pinchos Morunos

  1. Lo primero que harás será la mezcla de especias, para ello vierte todos los ingredientes en la Thermomix o la batidora y pulveriza hasta convertir en polvo. También puedes hacerlo en un mortero y será más auténtico si cabe. Reserva.
  2.  En un bol echa los 50 gr. de aceite de oliva, 15 gr. de la mezcla de especias y el manojo de perejil picado, mézclalo todo muy bien.
  3. Corta la carne a trozos de unos dos (2) cm de lado o pidele a tu carnicero que te la corte.
  4. Pela y corta la cebolla en trozos grandes, añádesela a la carne junto con el adobo que has preparado y mezcla muy bien para que se integren los ingredientes, si quieres puedes utilizar un guante de plástico para no ensuciarte demasiado las manos pues las especias pueden teñir un poco.
  5. Deja la carne bien tapada con papel film transparente y reservada en el frigorífico al menos una noche para que coja el sabor del adobo.
  6. Pincha la carne en las baquetas intercalando algunos trozos de cebolla.
  7. Enciende la barbacoa, la plancha o sartén a fuego fuerte y cocina los pinchitos hasta que estén bien hechos por dentro y dorados, unos 2 ó 3 minutos por cada lado, en total entre 8 y 12 minutos.
  8. Sírvelos inmediatamente en una fuente pero ten la precaución de no comerlos directamente de la brocheta porque podrías quemarte los labios.

Curiosidades de la receta de pinchitos morunos

*La carne que se utiliza normalmente en los pinchitos morunos es de cordero por razones obvias, pero en casa la que suelo utilizar es la de cerdo o pollo  pues el cordero no suele gustar a todo el mundo. En concreto la pieza que utilizo es aguja de cerdo que resulta muy jugosa. Hay quien utiliza paleta o pata y hasta lomo pero me parecen carnes mas magras y por tanto mas secas para la barbacoa, eso sí, tienen menos grasas y son ideales para la plancha y dietas bajas en grasas. Si utilizas carne de cordero te recomendaría la pierna de cordero que tiene un sabor intenso y es fácil de cortar o la espalda que al tener mas grasa es mas jugosa.

Esta receta es ideal para la barbacoa pero si no tienes o no puedes usarla siempre puedes utilizar una plancha o una sartén. A veces yo no pincho la carne y la salteo en la sartén, también está muy buena pero como una buena barbacoa que deja ese sabor a carbón y humo nada de nada.

Las especias es mejor utilizarlas en grano y molerlas en el momento de utilizarlas pues así desprenden más frescura y aroma. Si la tienes en polvo no pasa nada. Yo suelo moler la cantidad que te pongo que es mas de lo que vas a utilizar por lo tanto guárdala en un botecito y la tendrás lista para otras elaboraciones como un tajine, pollo asado, cuscus, falafel, arroz o cualquier receta que se te ocurra.

La clave de esta receta son las especias como ya he comentado pero si eres perezos@ o no tienes tiempo de hacerla, puedes comprar la mezcla ya hecha. Hay una mezcla muy buena de la marca «Ruca« que reproduce prácticamente igual a la mezcla que pongo, la puedes encontrar en «Hipercor» entre otros sitios.

La cantidad especias que debes de utilizar en la receta es de 15gr. por cada kilogramo de carne.

Un truco para que los pinchitos o brochetas no se quemen si son de madera, es meterlos en agua previamente así absorberán el agua y se mantendrán húmedos durante la cocción. Si las brochetas son planas la carne no girará al darle la vuelta y podrás voltearla con más facilidad, sino, tienes la opción de insertar un par de pinchitos para facilitarte la tarea.

Con la cebolla que me sobra suelo saltearla en una sartén y servirla como acompañamiento junto con arroz basmati o patatas fritas.

Con esta receta participo en el concurso «La vuelta al mundo» del blog de Nieves «Igloo Cooking».

Esta receta es 100% sin gluten y por lo tanto apta para Celíacos, de todos modos nunca está de más el comprobar los envases de los productos y cerciorarse que están libres de gluten, aunque la mayoría de las marcas ya se van preocupando de informarnos.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

Nota: El autor no tiene ninguna relación comercial o de otra índole con “Ruca”  y/o “Hipercor“ estos enlaces son puramente informativos.

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Ensaladilla de pulpo a la gallega

Ensaladilla de pulpo a la gallega. Como no podía ser de otra manera en verano no puede faltar una buena ensaladilla, decidme que bar, por lo menos aquí en Andalucía, no tiene una ensaladilla en su carta, ya sea ensaladilla rusa, ensaladilla de gambas, salpicón u otras, la que traigo hoy es una receta de veranola ensaladilla de pulpo casera, mas de otras tierras que de esta pero que curiosamente se ha establecido desde hace mas de una década en tierras gaditanas, por lo tanto ya se le puede considerar de la cocina de Cádiz.

Una de las primeras y la más famosa ensaladilla de pulpo es la del mítico Restaurante gaditano «El Balandro» donde es una de las estrellas de la carta, aunque no sólo en Cádiz se elabora, aquí en Chiclana de la Frontera hay una venta que también «lo clava», la clásica «Venta La Alegría» donde la especialidad es la cocina Asturiana pero que también puedes tomarte una buena parrillada o tapear alzando un culín de sidra, lo mejor de esta venta amén de los platos es el servicio, la amabilidad y simpatía del personal hacen que te sientas en casa, cosa que últimamente brilla por su ausencia en algunos establecimientos, parece que les debas algo por cómo te tratan, con lo fácil que es esbozar una sonrisa.

La ensaladilla no tiene misterio ninguno, no sé porqué hay sitios donde está incomestible ya sea porque la ponen muy salada, con poca o mucha mahonesa, con ingredientes de una pésima calidad o preparados para ensaladilla congelada, con lo rápido y fácil que es hacer una ensaladilla casera buena no deberíamos escatimar en el poco tiempo y coste de esta, pues en función de los ingredientes será más o menos barata, a gusto de nuestro bolsillo o del comensal. Así es como hago yo esta ensaladilla casera.

Ingredientes para la receta de ensaladilla de pulpo a la gallega

Elaboración de la receta de ensaladilla de pulpo a la gallega

  1. Pela las patatas, lávalas bien y trocéalas en dados pequeños mas o menos iguales para que todos se cuezan igual.
  2. Pon una cacerola con abundante agua y un puñado de sal, llévala a ebullición y cuando esté hirviendo echa las patatas hasta que estén tiernas, deberás ir vigilandolas cada diez (10′) minutos para que no se te pasen pero que tampoco te queden duras. Cuando estén listas, las escurres y esperas a que se enfríen.
  3. Corta el pulpo en trozos pequeños y similares, mézclalo con las patatas, una cucharada de aceite de oliva y un poco de flor de sal (o sal marina).
  4. Mezcla en un bol media (1/2) cucharada de pimentón y media (1/2) de pimentón picante con la mahonesa e incorpóralo a las patatas. Mueve todo muy bien pero con cuidado de no desmenuzar las patatas en exceso.
  5. Mete la ensaladilla en el frigorífico para que se enfríe.
  6. Para hacer el aceite de pimentón, echa en un bol pequeño dos (2) cucharadas de aceite de oliva y el resto de pimentón dulce y picante, mezcla bien y resérvalo. Puedes guardarlo en un bote e ir usando cuando te haga falta pues se conserva bien.
  7. Sirve la ensaladilla en un molde redondo o simplemente en un plato y vierte  el aceite de pimentón por encima en cantidad a tu gusto y un poco de flor de sal.
¡Prepara picos para comerla y si son pulgarcitos yeyé mejor que mejor!
 
 

Curiosidades de la receta de ensaladilla de pulpo a la gallega

Esta receta de ensaladilla de pulpo está pensada para cuatro (4) raciones bien servidas, plato único por supuesto o varias tapas según la cantidad que pongas en cada tapa.

Para degustar esta ensaladilla sería conveniente sacarla del frigorífico al menos media (1/2 h) hora antes de consumirla para que no esté excesivamente fría y puedas apreciar bien el sabor. Si la comes de un día para otro todavía estará mas fresquita y buena pues se habrán integrado bien todos los sabores.

El pulpo de esta receta ya lo tenía cocido, no se tarda mucho en cocerlo, lo puedes encontrar fresco o congelado pero si no quieres cocerlo también lo venden  ya cocido y te ahorrarás ese paso. También puedes aprovechar un pulpo que hayas cocido para otra receta como pulpo a feira con cachelos, salpicón o ensalada de pulpo.

La mahonesa me gusta usarla casera, a no ser que de antemano sepa que no se va a consumir en su totalidad al día siguiente, por tanto si haces mahonesa casera ten  cuidado con romper la cadena de frío y conservarla adecuadamente. Si te da pereza hacerla o sabes que no la vas a consumir de inmediato utiliza una mahonesa envasada de calidad comprobando que no contiene gluten si eres intolerante.

La cantidad de salsa mahonesa es un poco al gusto, hay a quien le gusta mas jugosa y a quien le gusta con poca de modo que te aconsejo que le vayas añadiendo cucharadas hasta que adquiera la consistencia que a ti te gusta.

Esta receta es 100% sin gluten y por lo tanto apta par Celíacos, de todos modos nunca está de más el comprobar que los productos envasados están libres de gluten aunque la mayoría de las marcas ya se van preocupando de informarnos.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.