Crema de patata asada, huevo poché con setas y mojama al Tintilla de Rota

Crema de patata asada, huevo poché, setas y mojama al Tintilla de Rota. El pasado día 27 de junio, tuvo lugar el primer encuentro de blogueros gastronómicos y prensa de Cádiz, en el Hotel Barceló Montecastillo, de Jerez de la Frontera.

Este Encuentro estuvo organizado por la Delegación de Jerez de la Asociación de Empresas Turísticas de Cádiz, Lola Rueda, Pilar Ruiz Rodríguez Rubio, y SER Emprendedores, de Radio Jerez. Se creó un logo (el que veis encima de este párrafo), una cuenta de twitter «Gastro Blogs Cádiz» y un hashtag a tal efecto ·#‎GastroBlogsCádiz‬, que espero se sigan usando durante mucho tiempo.

Curiosamente, Cádiz es la provincia Andaluza con mayor número de blogs gastronómicos, y no se había dado la circunstancia de celebrar ningún evento de similar características,  pero Lola Rueda y Pilar Ruiz se percataron de ello y les faltó tiempo para ponerle remedio. Diez reconocidos blogueros de esta provincia, entre ellos el que suscribe, con su pinche de cocina, se colocaron el delantal para cocinar in situ, las recetas gaditanas y así sorprender a un buen número de periodistas y críticos gastronómicos, entre los que se encontraban Pepe Monforte, Ivan Ricoy, Eugenio Camacho, Eduardo Robles, entre otros.

El plato que presentamos mi socia Carmen (Bate & Monta) y yo, fue una Crema de patata asada al aceite de oliva virgen extra, huevo poché, setas y mojama al tintilla de rota (Bodega el Gato). Es una receta que ya tenía publicada anteriormente (Huevo poché con crema de patata y setas), pero que la he versionado para la ocasión, ya que se trataba de presentar recetas con productos gaditanos. Al parecer, según me comentaron, gustó mucho a los asistentes.

El equipo «De Camino a mi Cocina» Ralu y Carmen (Bate & Monta), en acción.

Esta receta está pensada para cuatro (4) personas.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes de la receta de crema de patata asada, huevo poché, setas y mojama al tintilla de Rota

Para crema de patata asada al aceite de oliva virgen extra

  • 400 gr. de patatas de Sanlúcar
  • 100 gr. de aceite de oliva virgen extra
  • 100 gr. de nata
  • Media cucharada pequeña de orégano
  • nuez moscada
  • pimienta blanca molida
  • sal

Para el huevo poché o escalfado

  • Cuatro huevos
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal en escamas o sal de hielo
  • Pimentón de la Vera

Para el salteado de setas y mojama

  • Setas variadas
  • 125 ml. de vino Tintilla de Rota
  • Un trozo de mojama de atún rojo salvaje de almadraba Gadira
  • Una cucharada de aceite de oliva virgen extra

Elaboración de la receta de crema de patata asada, huevo poché, setas y mojama al tintilla de Rota

  1. Lo primero es asar las patatas para elaborar la crema de patata y aceite de oliva, de modo que comienza lavando muy bien las patatas bajo el grifo, quitándole toda la tierra con un cepillo, deben de quedar muy limpias ya que las vamos a asar con la piel. Utiliza patatas de similar tamaño, de esta forma todas se asarán al mismo tiempo.
  2. Enciende el horno a 180º arriba y abajo, mientras tanto envuelve las patatas  individualmente en papel de aluminio, pliega bien el papel aluminio para que quede bien cerrado el paquetito (como si fuese al vapor o papillote). Cuando el horno tenga la temperatura adecuada, mete las patatas en la bandeja central unos cuarenta (40) minutos*.
  3. Cuando estén hechas las patatas, déjalas templar para no quemarte al pelarlas. Una vez templadas las pelas, las troceas y las pones en el vaso de la batidora (o Thermomix) con el aceite de oliva, la nata, el orégano, una vuelta de molinillo de pimientas, una pizca de nuez moscada y un poquito de sal. Batimos muy bien hasta conseguir una crema suave y muy aromática. Resérvala.
  4. Limpia bien las setas si son naturales, córtalas en trozos pequeños y en una sartén echa una cucharadita de aceite de oliva virgen extra. Saltea las setas un par de minutos y añade el vino Tintilla de Rota hasta que reduzca al menos una tercera parte.
  5. Para hacer los huevos poché o huevos escalfados, corta un trozo de papel film transparente de unos 25 cm de lado, forra un bol pequeño con este, echa unas gotas de aceite de oliva virgen extra y extiéndelo sobre el papel film. Casca un huevo en el bol forrado y  salpimiéntalo. Coge los extremos del papel film formando un paquetito y ciérralo haciendo un nudo para que no se escape el huevo. Puedes coger los extremos y ponerle una pinza de las que se le ponen a los envases para mantenerlos frescos una vez abiertos.
  6. Pon al fuego un cazo con agua hasta que esté hirviendo, baja el fuego para que hierva lentamente. Introduce los huevos unos cinco (5’) de minutos y sácalos del cazo. Tendrás que servirlo inmediatamente si no quieres que la yema se termine de cocer y se ponga dura.
  7. Para el montaje del plato, coloca la crema de patata asada en el fondo de un bol o plato hondo. Saca el huevo del papel film con mucho cuidado y lo pones sobre la crema, a su alrededor dispón las setas con su reducción de Tintilla de Rota y espolvorea un poco de mojama rallada y  pimentón de la Vera. Unos granos de sal en escamas no le vienen nada mal.
Curiosidades de la receta de crema de patata asada, huevo poché, setas y mojama al tintilla de Rota

Para esta receta usamos unas patatas autóctonas. Las Patatas de Sanlúcar. Se caracterizan por su forma regular y alargada. Se plantan en arena fina y al no ofrecer resistencia al crecer, toman esa forma. Tienen un color blanco que la diferencia de la cultivada en otros terrenos, que obtienen un color amarillo o rojizo. La piel es muy fina y se desprende con los dedos.  Puedes reconocerlas porque, a diferencia de las otras, está cubierta de arena y no de tierra.

*El tiempo que pongo para asar la patata es orientativo ya que depende de muchos factores como el horno, el tipo y tamaño de la patata, etc. Para comprobar que la patata esté echa, con un guante para horno o un trapo de cocina presiona la patata y si cede al apretón es que la tenemos lista.

El vino usado en esta receta es el Tintilla de Rota (del que os hablé en las receta de risotto de calabacín y setas). Es un vino dulce que se produce a partir de la uva del mismo nombre, una uva tinta muy delicada y de baya pequeña que por las características del clima y de la tierra solo se cultiva en la localidad en la localidad Gaditana de Rota. Es un vino muy peculiar, por no decir único, ideal para postre o aperitivo. Pincha el enlace si quieres saber más sobre este interesante vino: Ver más. Si no lo encuentras puedes comprarlo on line o usar cualquier dulce tipo Pedro Ximénez.

La mojama es le da un punto salado, marino, que combina estupendamente con el conjunto del plato, yo la suelo rallar y mezclarla con la crema de patata asada o espolvorearla por encima para terminarlo. También puedes ponerla en pequeñas láminas o taquitos para darle textura. La que he usado es la Mojama de atún rojo salvaje de almadraba de Gadira, porque me parece extraordinaria, pero si la vas a rallar puedes usar cualquier otra pieza de menor calidad.

Si haces la crema previamente, la puedes calentar al baño maría, mucho mejor que al microondas.

La seta que mejor le viene a esta crema de patatas es la colmenilla o alguna silvestre con un sabor acentuado. Si no las encuentras usa champiñones, cualquier otra variedad, o una mezcla de estas.

Foto de familia de los blogueros gaditanos. Imagen cedida por Iván Ricoy (Genuine Andalusia)

El evento contó con la colaboración del portal «Destino Cádiz» y las siguientes empresas, que instalaron unos stands con sus productos gastronómicos:

A continuación os relaciono los blogs participantes en este evento, sus cocineros y las recetas que presentaron:

Los platos que presentamos en el encuentro de blogueros y prensa de Cádiz

Blogueros Gaditanos en plena faena en el Hotel Montecastillo

En estas últimas líneas quiero agradecer a los organizadores, colaboradores, blogueros y pinches la estupenda jornada que pasamos, donde nos divertimos mucho, que era de lo se trataba. En particular a Pilar Ruiz, que siempre cuenta con nosotros, realizando un trabajo de campo extraordinario (del que sólo se ve la punta, como los iceberg),  para que salga siempre todo bien. Y como no, a mi socia Carmen por acompañarme, planear el evento y coordinarnos (que es de lo mas divertido), ayudarme a sacar la receta adelante y compartir estos momentos para coleccionar.

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

 

Gazpacho de moras

Gazpacho de moras. La receta de hoy es circunstancial, os cuento porqué. Tenía pensado hacer un gazpacho, en concreto un gazpacho de sandía. La famosa receta que mi vecino Javi Recetas presento en su día en Canal Cocina, en el programa Blogueros Cocineros (ya está en marcha la edición de este año y puedes inscribirte si lo deseas). Pues bien, en la grabación tenía que aparecer alguien probando ese gazpacho de sandía y me eligió a mí. Fue un cameo divertido y mi primera intervención televisiva, pero de eso ya hace unos años. Bueno, lo que quería contaros es, que estando recolectando moras, de una hermosa morera que tienen mis padres (que por cierto da unos abundantes y ricos frutos con los que alguna vez he hecho mermelada), se me ocurrió que porqué no sustituir la sandía por moras. El dulzor y acidez de la mora le vendría genial a esta receta y aquí tenéis el resultado.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de gazpacho de moras

  • 300 gr. de moras negras
  • 600 gr. de tomates pera
  • Un (1) diente de ajo
  • Una (1) cucharada pequeña de vinagre de tintilla de rota (o de Módena)
  • 75 ml. de aceite de oliva virgen extra

Elaboración de la receta de gazpacho de moras

  1. Lava los tomates y los troceas. Lava también las moras y las escurres. Pela el diente de ajo y quítale la raíz.
  2. Pon los tomates, el ajo y las moras (reserva algunas moras para servir con el gazpacho) en la batidora de vaso o thermomix y tritura muy bien. Añade la cucharada de vinagre de tintilla y el aceite de oliva virgen extra.
  3. Pasa por el chino o cuela con un colador el gazpacho para que esté muy fino y no te encuentres pepitas de las moras.
¡Sirve muy frío con un poquito de hierbabuena y unas moras enteras!

Curiosidades de la receta de gazpacho de moras

Las moras son muy sensibles y delicadas, aguantan muy mal su manipulación y transporte. Recolecta con mucho cuidado escogiendo moras enteras y brillantes. Si usas moras frescas, no las laves hasta que las vayas a usar porque se estropean.

Si te apetece hacerlo pero no tienes moras frescas o silvestres, puedes comprar en la zona de congelados del supermercado una bolsa de frutas del bosque.

Puedes añadir cebolla y pimiento al gazpacho, y hasta pepino, pero en este caso te recomiendo que dejes macerar una noche todos los ingredientes.

En vez de hierbabuena puedes ponerle trocitos de algún queso curado con carácter que contraste con el dulzor de esta sopa fría de moras.

He usado un vinagre de Jerez a la Tintilla de Rota de Bodegas El Gato, le aporta además de la acidez que buscamos, un ligero dulzor como de pasas o higos secos, al igual que la mora, de modo que combina estupendamente con las sopas frías y gazpachos que llevan fruta o almendras. Hay que usarlo con moderación pues es muy intenso. Si no lo encuentras usa un un vinagre de Módena que también tiene el punto dulce.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Marmitako de atun rojo

 

Marmitako de atún rojo. De nuevo vuelvo a la cocina con una receta de atún rojo salvaje de almadraba ya que estamos en plena temporada de almadraba y para no olvidar lo aprendido en el Ronqueo, de la presentación de la VI Ruta del atún de Zahara de los Atunes, sobre los diferentes cortes y piezas del atún, os traigo esta receta.

Se trata de un guiso de pescado tradicional en el norte de España que con mucho cariño me la traigo aquí al sur para hacerla con nuestro atún rojo salvaje de almadraba, en vez de hacerla con bonito del norte como es lo normal. Este guiso marinero se solía hacer a bordo del barco con lo que tenían a mano, patatas, lo que pescaban, ya fuera bonito o cualquier otro pescado, y las verduras que llevasen.

Marmitako (en vasco) hace alusión al recipiente donde se hace el guiso, la marmita que usaban los pescadores donde hacían de comer cuando salían a la mar. Lo que aquí llamaríamos cazuela de bonito, o en este caso cazuela de atún rojo de almadraba. En otros puntos de nuestra geografía lo llaman caldereta, pero básicamente casi todos son parecidos y así es como yo hago este rico guiso de atún y patatas.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de marmitako de atún rojo

  • 500 gr. de atún tojo de almadraba
  • Un (1) kg. de patatas viejas
  • Medio (½) pimiento rojo
  • Una (1) cebolla
  • Dos (2) tomates
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Una o dos hojas de laurel
  • Media (½) cucharada pequeña de pimentón
  • guindilla (opciónal)
  • 125 ml. de vino fino (yo usé Fino Granero)
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal

Elaboración de la receta de marmitako de atún rojo

  1. Comienza pelando la cebolla y el ajo para el sofrito. Trocéalo muy fino, al igual que el pimiento rojo.
  2. Corta los trozos de atún rojo en dados de unos dos centímetros y medio, o dile a tu pescadero que te dé el pescado ya limpio y cortado. Salpimentalos.
  3. Pon una olla a fuego medio con cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen extra, rehoga un poco los dados de atún, lo justo para sellarlo, sólo unos minutos. Retíralo y lo reservas. El fondo que deja el atún dará sabor a este guiso.
  4. En la misma olla añade el ajo picado y antes de que se dore incorpora la cebolla y el pimiento. Añade un poco de sal, pimienta, las hojas de laurel y deja pochar unos minutos.
  5. Corta los tomates por la mitad y, en un rallador puesto sobre un bol, ralla los tomates por la parte cortada hasta extraer toda la carne. Tira la piel y reserva el resto.
  6. Pela las patatas, las lavas y las cortas en trozos “chascandolas” o “triscandolas” para que suelten la fécula y espese la salsa, con trozos irregulares pero de un tamaño similar, para que se hagan todos por igual. Las añades al sofrito cuando veas que está bien pochado. Deja rehogar unos cuatro o cinco minutos moviendo de vez en cuando la olla para que no se pegue.
  7. Pasado ese tiempo añade el vino fino y espera a que evapore todo el alcohol para añadir el tomate que tenías reservado, la guindilla (si la quieres usar para darle un punto picantito al guiso) y media cucharada pequeña de pimentón. Remueve bien e incorpora agua hasta casi cubrir las patatas, cubre la olla y deja a fuego bajo-medio hasta que las patatas estén tiernas.
  8. Es el momento de añadir el atún, apagar el fuego y dejarlo cocinar con el calor que aún queda en la cazuela pues, el atún tiene que estar poco hecho y jugoso. El hacerlo demasiado hace que esté duro y correoso por muy buen pescado que sea. Añade perejil picado a la olla y reserva unos minutos antes de servirlo.

¡On egin!

Curiosidades de la receta de marmitako de atún rojo

Para este guiso he utilizado lomo de atún rojo salvaje de almadraba de Gadira, que está ahora en temporada. También puedes usar bonito, atún blanco o cualquier otro tipo de atún. Si utilizas ventresca de atún el guiso sube a nivel experto 😉

Utiliza como te digo unas patatas viejas, que no tiene nada que ver con unas patatas feas y pasadas. No las uses nueva pues no adquirirán la textura que deseamos ni aportarán al guiso el almidón suficiente para espesarlo.

Si te gusta la salsa más espesa, te pasaste con el agua o no te espesó bastante, puedes añadir un majado de pan frito con ajo y pimiento choricero. Además de espesar, aportará un plus de sabor.

A mi me gusta el puntito picante y por eso suelo añadir una guindilla, siempre y cuando no vaya a comer de este guiso mi Grumete. Te lo dejo en tu mano si añadirla o no.

Acompaña este Marmitako con un vino blanco o espumoso. Yo lo he acompañado con un Manuel Aragón Suavignon Blanc, de Bodega Sanatorio.

Si te han gustado los platos de gres donde he presentado el Marmitako, puedes encontrarlo en “Gressierra“, en Chiclana de la Frontera.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Atún en manteca

Atún en manteca. Ya que estamos en temporada de almadraba y por tanto, de atún rojo, vamos a aprovecharla y disfrutar de este delicioso manjar. Esta vez, asesorado por mi pescadero, Fernando Coucheiro, he utilizado Solomillo de atún rojo, que me comenta que es magro pero con su punto jugoso. El solomillo del atún se encuentra en la parte superior del lomo, bajo la aleta dorsal.

Esta receta es una típica receta gaditana de la zona de la Janda y el Campo de Gibraltar, se elabora con manteca de cerdo, la cual yo la compro por esa zona, en la Carnicería de mi amigo Paco Melero. En Vejer de la frontera. La prepara con ajo, orégano y sal, lista para consumir y es de las pocas tan suaves y untuosas que he probado. De las que cuando las comes en una tostada no se te está repitiendo toda la mañana, porque el punto de especias es el justo, y es ideal para hacer este atún en manteca o cualquier otra receta como Lomo en manteca, del que te vende Paco en su Carnicería y es tan típico por Vejer. ¿Quién no se ha parado alguna vez en la Barca de Vejer a comerse un bocadillo de Lomo en Manteca?

Con las cantidades que te doy en la receta puedes hacer un par de tarros de unos 250 ó 300 gr., que el atún en manteca está muy bueno, pero no hay que abusar de él, y por eso suelo hacer poca cantidad. Si quieres hacer más solo tienes que adaptar las cantidades.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de Atún rojo en manteca

  • 500 gr. de solomillo de atún rojo
  • 500 gr. de manteca de cerdo
  • Cinco (5) dientes de ajo
  • Pimienta negra en grano (10 granos)
  • Pimienta blanda en grano (10 granos)
  • Pimienta de Jamaica en grano (3 granos)
  • Un (1) clavo de olor
  • Dos (2) hojas de laurel pequeñas ( o una grande)
  • Sal
Elaboración de la receta de Atún en manteca
  1. Pon una olla pequeña a fuego medio-bajo con la manteca.
  2. Cuando esté derretida añade los granos de las pimientas, las hojas de laurel y los dientes de ajo enteros y con piel, pero con un golpe dado bajo la hoja del cuchillo.
  3. Limpia bien el solomillo de atún, córtalo en buenos trozos, lo salas ligeramente y lo incorporas a la olla. La manteca debe de cubrir todo el atún.
  4. Baja el fuego al mínimo y deja que se confite el atún. Un truco para saber que está hecho cuando pinchas los ajos ceden, están muy tiernos y tornan a un color dorado.
  5. Retira los trozos de atún y los colocas en botes o en un recipiente que soporte bien el calor.
  6. Cuela la manteca de cerdo y rellena con ella los botes o el recipiente donde está el atún hasta cubrirlo por completo.

!Listo para comer en cuanto cuaje la manteca!

Curiosidades de la receta de atún rojo en manteca

El atún en manteca era antiguamente una forma de cocinar y conservar el atún para que durase más tiempo. A día de hoy no es necesario este tratamiento, pero se sigue elaborando de esta forma en Vejer y Barbate, por lo popular que es esta receta.

Yo he utilizado solomillo de atún rojo pero si usas lomo también quedará estupendo. Y si lo que usas es ventresca, ponte a llorar. Esta misma receta puede servirte para usarla con cualquier otra pieza de pescado similar como bonito, barcora o caballa.

El atún en manteca se suele comer frío, untando la manteca en un pan y sobre esta los trozos de atún, en bocadillos, tostadas o panecillos.

Para sacar los trozos del bote y no desmoronarlo, ponlo al baño maría y saldrá del bote fácilmente. También puedes ponerlo en el microondas a baja temperatura y muy poco tiempo.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Garbanzos con bacalao y tagarninas

Garbanzos con bacalao y tagarninas. Ya pasó la cuaresma y la semana santa pero no por ello hay que dejar de comer estos platos de cuchara tan sanos y nutritivos, ideales para una dieta sana y equilibrada, porque contiene muy poca grasa. Un potaje de garbanzos a la semana es todo un acierto en tu dieta, no importa si hace frío o calor, este guiso de garbanzos sienta de maravilla en cualquier época del año.

Esta es una versión del típico Potaje de Vigilia o Potaje de bacalao, garbanzos y espinacas, pero yo le he puesto tagarninas, de las que recoge mi suegro en el campo y que con tanto esmero limpia mi suegra. La receta tiene algo especial, como todas. Yo nunca había hecho este potaje y hablándolo con mi compañero Juan Camacho, comenzamos a buscar cómo lo hacían unos y otros. Él me comentaba que su madre lo hacía, pero que no sabía cómo. Yo le pregunté a mi Tía Rafi, para saber cómo se hacía en mi familia este guiso tradicional. Al final, entre lo que  leí, lo que me dijeron y las tagarninas que me regalaron ha salido este potaje tan contundente.

Ahora en primavera es temporada de tagarninas, como ya te comenté en la receta de Tagarninas Esparragás, se utilizan, como norma general, para guisos, berzas, potajes revueltos o tortillas. Es una planta herbácea o verdura silvestre y la suelen recoger los hombres del campo, aunque ya las hay de cultivo en los mercados, peladas y hasta cortadas. Te aseguro que te ahorrarás un trabajo y algún que otro pinchazo, pero la silvestre da mejor sabor. En algunos sitios se les llama cardillos, cardo de olla o cardellet, entre otros nombres.

Para esta receta deberás desalar el bacalao previamente, si no sabes cómo hacerlo, abajo en curiosidades te lo explico.

La receta está pensada para cuatro (4) personas.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de garbanzos con bacalao y tagarninas

  • 300 gr. de garbanzos secos
  • 300 gr. de bacalao desalado
  • 300 gr. de tagarninas frescas
  • Dos (2) cebollas
  • Dos (2) tomates maduros
  • Un (1) puerro
  • Una (1) zanahoria
  • Una (1) cabeza de ajos
  • Una (1) cucharada pequeña de pimentón dulce
  • Media (½) cucharada pequeña de comino molido
  • Dos (2) clavo de olor
  • Una (1) hoja de laurel
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal

Elaboración de la receta de garbanzos con bacalao y tagarninas

  1. Deberás empezar la receta la noche anterior a la elaboración del potaje, poniendo los garbanzos en remojo con agua (Si no tienes el bacalao desalado puedes meterlo con los garbanzos y no tendrás que añadirles sal o bicarbonato). Deja los garbanzos en el agua al menos doce (12) horas. El bacalao, si es un lomo deberá estar de 24 a 48 horas. En curiosidades te doy más detalles sobre el desalado.
  2. Lava y pela las cebollas, la zanahoria y el puerro. Pela también la cabeza de ajos, pero sólo las capas exteriores, no los dientes. Retira un par de dientes de ajo y Pélalos. Reserva todas las verduras.
  3. Pon una olla al fuego con un (1) litro de agua, añade los garbanzos limpios y escurridos, el puerro cortado por la mitad, la cabeza de ajos, una cebolla con los dos clavos de olor clavados sobre ella y la hoja de laurel. Cocina a fuego medio hasta que estén tiernos los garbanzos o cierra la olla exprés unos veinte (20′) minutos. Pasado el tiempo de cocción escurre los garbanzos reservando el agua de cocción y retira las verduras.
  4. Mientras se hacen los garbanzos, ve preparando el sofrito, para ello pica la cebolla y los dos dientes de ajo en trocitos muy pequeños. Pon una sartén a fuego medio-bajo con dos o tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra, cuando esté caliente añade el ajo picado y antes de que empiece a dorarse incorpora la cebolla picada.
  5. Ralla los tomates y los añades a la sartén junto a la cucharada de pimentón dulce y la punta de una cuchara pequeña de comino molido cuando la cebolla esté bien sofrita. Deja cocinar, sin dejar de vigilar para que no se queme, unos diez (10′) minutos.
  6. Prepara las tagarninas. Lávalas muy bien las tagarninas para quitarle los restos de tierra que puedan tener y las cortas en trocitos. Se las incorporas al sofrito y las dejas rehogar hasta que estén tiernas. Si fuera necesario, que es lo normal, añade un poco de agua de la cocción de los garbanzos. Si son silvestres es posible que sean algo más duras, por tanto necesitarán algo más de cocción. Te recomiendo que le des un escaldado o cocerla un poco con los garbanzos antes de añadirla al guiso, porque así no te dejará el potaje seco.
  7. Desmenuza o corta en trozos pequeños el bacalao si no lo has hecho previamente o si no lo compraste ya desmigado. Ten cuidado que puede tener espinas y encontrarte alguna en el guiso puede ser desagradable cuanto menos. Resérvalo.
  8. Añade los garbanzos al potaje y remueve con cuidado para no deshacerlos. Añade agua de la cocción de los garbanzos si hiciese falta, ten en cuenta que este potaje de garbanzos lleva poco caldo.
  9. Es el momento de incorporar el bacalao y mover suavemente para mezclarlo bien. Prueba de sal, espera unos minutos para que se cocine y déjalo reposar antes de servir.

Cómetelo recién hecho o al día siguiente que ya esta reposado.

Curiosidades de la receta de garbanzos con bacalao y tagarninas

El bacalao lo he comprado en un lomo y lo he desalado. Puedes hacerlo así o comprarlo ya desalado así evitarte este paso. También puedes elegir entre comprarlo en un lomo y desmigarlo como te comento en la receta o comprarlo ya desmigado. Si optaste por la primera opción, deberás meter en agua el lomo durante 24 o 48 horas, dependiendo del grosor del lomo o si está desmigado que necesita menos de 24 horas. El agua deberás ir cambiándola cada 6 u 8 horas. A cada uno nos gusta un punto de sal, yo suelo pegarle un pellizco al lomo y probarlo, así me hago una idea de en qué punto se encuentra, es preferible que esté soso a que te quede salado y estropee el potaje.

Si aún no te ha quedado muy claro cómo desalar bacalao, puedes visitar este enlace de mi amigo Javi Recetas: Cómo desalar Bacalao paso a paso.

Si no encuentras tagarninas puedes ponerle espárragos trigueros, espinacas, acelgas o simplemente no ponerle verdura. Lo que si te aconsejo es que la verdura sea fresca.

Los garbanzos puedes comprarlos envasados y evitarte el tenerlos que poner la noche anterior, si es así te recomiendo que los laves muy bien para quitarles todo el conservante que puedan llevar. Yo soy más de comprarlos secos y cocerlos porque los conservados me resultan muy salados y el sabor a conserva no se logra disimular del todo.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Arranque Roteño

Arranque Roteño. Antes de que se nos olvide totalmente que el verano ha pasado y que el frío invierno está por venir, aquí en el sur todavía nos quedarán días soleados hasta noviembre y podemos disfrutar de refrescantes recetas que nos hagan pasar de la mejor forma la transición de estaciones, acordándonos de lo bien que lo pasamos siempre en Rota gracias a mi amiga Pilar Ruiz (Aprendiendo a Cocinar) y que gracias a ella  y a Turismo Rota, rescaté esta refrescante y sana receta, que realizamos en el II Encuentro de Blogueros: Rota, mar y viñas, del cual ya os hablé en entradas anteriores.

El Arranque Roteño, como bien reza su nombre, se elabora en la localidad de Rota, digamos que es una especie de crema o sopa fría a caballo entre el salmorejo y el gazpacho, hecha con tomates de la huerta roteña, la Mayetería, de donde los Mayetos recogían sus cosechas tempranas, en el mes de mayo -por eso lo de Mayetos- para llevarlas al mercado.

Esta receta típica gaditanacon una historia de más de 50 años, era la tradicional comida que los hombres de campo preparaban en las tierras que trabajaban, y su textura variaba según el gusto del que lo preparaba, mas o menos densa, mas o menos triturada, con mas o menos ajo… Lo comían directamente del lebrillo, como se suele decir, cucharada y paso atrás, y usando como cucharas trozos de pimiento, cebolla o la misma corteza del pan.

Para elaborar esta receta de la forma tradicional, además de los ingredientes, te va a hacer falta un lebrillo de barro y una «machacaera» de madera (brazo del mortero o almirez).

Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de Arranque Roteño

  • Un (1) kg. de tomates maduros (pera preferiblemente)
  • Tres (3) pimientos verdes (cuerno de cabra o italianos)
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Medio (½) kg de pan de campo con un par de días (pan asentao de telera)
  • Aceite de oliva virgen extra (125 ml. aproximadamente)
  • Sal

Elaboración de la receta de Arranque Roteño

  1. Comienza Pelando los dientes de ajo, cortando dos (2) pimientos en trozos pequeños y pelando los tomates. Quita la corteza al pan, resérvala para mas tarde y córtalo en trocitos pequeños.
  2. Pon en el fondo del lebrillo un poco de sal, los dos dientes de ajo y el pimiento troceado y empieza a majar con la machacaera de madera hasta conseguir una especie de pasta.
  3. A continuación añade los tomates troceados y sigue triturando hasta ligarlo con la pasta de ajo y pimiento.
  4. Es el momento de ir añadiendo el pan asentao en trocitos pequeños y poco a poco, para ir dando consistencia a la crema y a su vez incorporando el aceite de oliva virgen extra, con un fino hilo sobre todo el majado.
  5. Sigue machacando y mezclando hasta obtener la textura deseada. Corrige de sal si hiciese falta.

Usa los trozos del pimiento reservado, cebolla o aprovechando la corteza de pan para llevártelo a la boca!

Curiosidades de la receta de Arranque Roteño

Los tomates han de estar bien maduros, colorados y preferiblemente de pera, pero cualquier otro tomate puede servirte para hacer el Arranque.

Con dos (2)  dientes de ajo tienes mas que suficiente para un (1) kg de tomates, si te gusta más fuerte o más dócil, sólo tienes que añadir o quitar dientes.

El pan es muy importante en esta receta, hay que utilizar «pan asentao», es decir, pan con al menos un par de días desde que sale del horno, para que la miga esté prieta. Los panes que suelo utilizar son panes artesanos y aquí os pongo algunos establecimientos de la provincia de Cádiz para que os hagaís una idea y os sirva de orientación para comparlo cuando piseís esta tierra: Pan de horno de leña de Al pan pan, en Puerto Real, Pan moreno de la panadería El Almarchal, de Zahara de los Atunes, Pan del Molino de abajo de El Bosque, pan moreno de la panadería Hermanos Sanchez de Algar, Panadería Gonzalo de Alcalá de los Gazules, y alguno mas que se me pasará…

Tradicionalmente el arranque se ha hecho en el lebrillo pero puedes evitarte el trabajo usando una batidora o Thermomix, lo tendrás hecho en dos minutos, además de darle el punto que tu quieres con más facilidad, a mi me gusta mas pasado pero quizás a ti te guste encontrarte trocitos de cada ingrediente.

Un truco para que no se te mueva el lebrillo mientras estás machacando es poner un trapo doblado debajo, además de evitar el movimiento, amortiguará el golpe y el sonido.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Salchichas de ternera retinta con berenjenas y pimientos

Salchichas de ternera retinta con berenjenas y pimientos. La idea de este guiso me surge al encontrar en mi carnicería de confianza, Paco Melero, unas salchichas de ternera retinta y quererle dar una utilidad mas allá del típico perrito caliente. Se me ocurrió hacer un guiso con ellas parecido al que ya tengo publicado de «Ragú de Salchichas«, que nos gustó mucho y buscando por la red encontré la receta de spetzofai que tiene publicada Carlos (Mercado Calabajío), que es un plato de origen griego de salchichas especiadas y pimientos, pero adaptado a ingredientes que tenemos mas a mano y por supuesto a nuestros gustos, como siempre digo, cada uno le dá el punto al plato que más le gusta y esta receta no va a ser menos.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de salchichas de ternera retinta

  • 500 gr. de salchichas de ternera retinta
  • Una (1) berenjena grande
  • Tres (3) tomates grandes y maduros
  • Dos (2) pimientos verdes (italiano)
  • Un (1) pimiento rojo
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Una (1) cebolla fresca
  • 40 ml. de vino blanco Gran Mayeto
  • Un (1) Chile o ají
  • Pimienta negra
  • Orégano
  • Aceite de oliva virgen extra (yo usé Legado Sierra)
  • Sal

Elaboración de la receta de salchichas de ternera retinta

  1. Lava bien todas las verduras y empieza cortando la berenjena en rodajas de mas o menos un (1) cm de grosor, ponlas en un escurridor con un poco de sal para que suelten amargor,
  2. Corta los tomates por la mitad y rállalos con un rallador para obtener toda la pulpa y desechar la piel.
  3. Pela y pica muy fina la cebolla y el ajo. Corta los pimientos en trozos más grandes, reserva todo para después freírlo.
  4. Pon una sartén a fuego medio con tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra, en ella fríe las salchichas enteras, sin cortar ni separarlas, ya lo harás mas tarde. Tapa la sartén pues las salchichas salpican y pueden quemarte. Una vez estén bien fritas las reservas
  5.  Fríe los pimientos en la misma sartén y reservalos a igual que las salchichas.
  6. Sin cambiar la sartén, y si hiciese falta una cucharada más de aceite de oliva la añades, sofríe el ajo y la cebolla, que se doren y ablanden. Si lo ves necesario baja un poco el fuego para que no se quemen, pues daría sabor amargo al guiso.
  7. Cuando esté bien pochado incorpora el vino y cuando reduzca añade el tomate rallado. Tapa la sartén y deja cocinar unos quince (20′) minutos a fuego medio/bajo.
  8. Mientras se fríe el tomate, pon otra sartén al fuego y a modo de plancha -sin aceite- haces las berenjenas poco a poco y las vas reservando.
  9. Destapa el tomate y a fuego bajo déjalo unos minutos más para que evapore un poco de agua, añade un poco de sal, dos vueltas del molinillo de pimienta negra y una pizca de orégano.
  10. Es el momento de cortar las salchichas y añadirlas a la sartén junto con los posibles jugos que hayan podido soltar. Las dejamos cocinar unos minutos con la sartén tapada para que se hidraten y suelten todo el sabor.
  11. Pasados esos minutos incorporamos los pimientos y berenjenas y tapamos unos cinco (5′) minutos más para finalizar el guiso.

Prepara un buen pan de campo!

Curiosidades de la receta de salchichas de ternera retinta

Salchicha de ternera retinta es la que he usado en esta receta, pues mi carnicero Paco Melero de Vejer de la Frontera (Cádiz), las suele tener muy frescas y de total confianza, tanta, que las sirven en el Bar de Tapas «Valvatida« en un plato al que su cocinero Jesús Recio puso de nombre «Retindog», que no es otra cosa que un perrito caliente de ternera retinta, mostaza y cebolla frita muy bien presentado.

Puedes usar cualquier otra salchicha de carnicería que encuentres, seguro que no varía la esencia primordial del plato.

Los tomates también puedes pelarlos y picarlos muy finos, pero a mi me gusta más esta textura al rallarlos. Si no tienes tomates puedes usar una lata de tomate triturado que sea de calidad.

El vino para mi es algo esencial, si pones un mal vino estropeas el plato. Yo para cocinar suelo usar el vino blanco Gran Mayeto de Bodega el Gato que da unos resultados estupendos. Si no tengo pues cualquier vino que tenga a mano y sea capaz de beberme sin que me cambie la expresión de la cara a desagradable.

Que no tienes berenjena o no te gusta, prueba a ponerle calabacín, todo sea  eso…

A mi me gusta mucho el toque picante, pero si te gusta más suave no le pongas chili. Y si te gusta pero no lo tienes, prueba con una guindilla, dará un resultado parecido.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Rabo de Toro

Rabo de toro estofado. Esta receta aunque en su nombre indica toro, la carne que suele usarse en la mayoría de los casos es de ternera o buey pues el rabo de toro de lidia suele ser mas bien escaso con ocasión de una corrida de toros y de precio algo mas elevado que el que puedas encontrar de ternera.

He de confesaros que durante mucho tiempo este fué mi plato favorito, y os preguntaréis que siendo mi plato favorito, cómo es que no tenía la receta publicada… Pues bien no ha sido por la dificultad del plato sino por el simple hecho de cada vez que lo he elaborado no me ha gustado la foto, ya que no es muy agraciado de retratar.

Receta tradicional donde la haya, muy típico en Córdoba sin embargo, cada región tiene una receta parecida en la que la diferencia suele marcarla el vino, que es el gran protagonista de esta receta ya sea para macerarlo, cocinarlo o maridarlo.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de rabo de toro

  • Un rabo de toro (ternera o buey) troceado
  • Una (1) botella de vino tinto
  • Una (1) cebolla grande
  • Un (1) puerro
  • Medio (½) pimiento rojo
  • Dos (2) tomates maduros
  • Tres (3) zanahorias
  • Una (1) hoja de laurel
  • Dos (2) clavos (especia de olor)
  • Media (½) guindilla (opcional)
  • Pimienta negra
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal

Elaboración de la receta de rabo de ternera

  1. Limpia bien el rabo y quita las grasas que hayan podido quedar, salpiméntalo.
  2. Pon una sartén a fuego medio con tres o cuatro de cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
  3. Enharina ligeramente los trozos de rabo y los doras por todos los lados en la sartén, hazlos poco a poco para que no baje la temperatura y se cuezan en vez de freirse.
  4. Mientras se dora el rabo, corta las verduras (cebolla, puerro, pimiento y zanahorias) en trocitos muy pequeños (brunoise) y ralla los tomates o pélalos y lo troceas igual.
  5. Una vez dorados todos los trozos de cola los reservas y todo el contenido de la sarten (aceite y restos de haber dorado el rabo) los echas en una olla amplia donde posteriormente guisarás el rabo. Puedes añadir un poco de vino y así llevarte consigo todos los restos que darán el sabor al estofado.
  6. Pocha la cebolla, el puerro, la zanahoria y el pimiento en la olla, cuando estén bien blanditas añade el tomate rallado un poco de sal, las hojas de laurel, los clavos y pimienta negra recién molida (si quieres también puedes añadir aquí la media guindilla).
  7. Es el momento de volver con el rabo a la olla, marearlo con las verduras y añadir el vino tinto hasta que prácticamente lo cubra, si no lo cubre puedes añadir algo de caldo.
  8. Dejarás cocer a fuego lento hasta que esté tan tierna la carne que se despegue del hueso, vigilando que no se pegue al fondo y moviendo de vez en cuando con cuidado para no separar la carne del hueso y poder presentarlo entero.
  9. Terminada la cocción prueba de sal y corrige si hiciese falta.
Buen provecho!

Curiosidades de la receta de rabo de toro

Busca un rabo de ternera de calidad, encárgaselo a tu carnicero de confianza, lo agradecerás en el resultado pues una mala carne te puede estropear el guiso y no lograrás ablandarla.

En el caso que tengas que añadir caldo puedes utilizar un caldo de pollo que tengas casero o si no tienes añade agua pero ten cuidado puede quedarte soso.

Puedes hacerlo en la olla exprés en vez de dejarlo a fuego lento pero te recomiendo que lo pongas a temperatura media y no lo cierres más de treinta (30′) minutos para que no se te pegue. Si hace falta vuelve a cerrar la olla unos minutos. Es preferible hacer esto a que se te pegue al fondo y pierdas el guiso.

Una vez tengas guisado el rabo puedes retirar los trozos de rabo y triturar la salsa o pasarla por un chino, perderá brillo pero será más homogénea y no te encontrarás trozos de verduras si es que te disgusta. Si te ha quedado algo líquida puedes ponerla al fuego y reducirla un poco.

El vino es la clave de este estofado, en este caso tinto que es como lo hacía mi tío Juan, generoso con el vino decía y le zampaba una botella, el tinto le da ese color oscuro al guiso que tanto me gusta… Puedes cambiarlo por un fino de Jerez o un Montilla y tendrás un Rabo de toro a la cordobesa.

No hay mejor forma de acompañar este rabo que con unas buenas patatas fritas caseras. También puedes hacerlo con puré de patatas, cuscús o arroz cocido y por supuesto un pan con buena miga para mojar la salsa.

Este estofado de rabo de ternera es mejor hacerlo de un día para otro para que repose y concentre bien el sabor, merece la pena esperar.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

 

Conejo con tomate

Conejo con tomate. El conejo es el ejemplo de carne proteica y económica, ideal para dietas bajas en grasas y como alternativa a otras carnes como el pollo y el pavo. Al ser una carne económica contribuye con ello a que las familias puedan comer sano, bien y variado por ello me parece una estupenda opción a la iniciativa de mi amiga Helena, del blog «Mi Puchero» donde se trata de publicar una  #RecetasSolidariasParaNavidad.

Si quieres saber más sobre esta iniciativa pincha aquí.

Podemos diferenciar en general dos tipos de conejos: Los criados en granja y los silvestres. Los domésticos suelen tener mayor cantidad de grasa, un tono mas rosáceo y mas tiernos que los conejos de campo, que suelen ser de una carne mas prieta.

Para esta receta yo utilicé un conejo de campo y por eso le doy una amplia cocción, sino se nos quedaría la carne demasiado dura e incomestible.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de Conejo con tomate

  • Un (1) conejo
  • Una (1) cebolla
  • Medio (½ )pimiento rojo
  • Medio (½ ) pimiento verde
  • Una (1) zanahoria
  • Cinco o seis (5-6) tomates maduros
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Una (1) ramita de romero
  • Una (1) ramita de tomillo
  • Un (1) manojo de perejil
  • Media (½ ) cucharadita pequeña de orégano
  • Una (1) cucharadita pequeña de azúcar
  • Pimienta negra
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra Gil-Luna

Elaboración de la receta de Conejo con tomate

  1. Limpia y trocea el conejo si no lo ha hecho por ti el carnicero. Unos diez o doce trozos será suficiente. Salpimenta los trozos.
  2. Pon una olla a fuego medio con dos o tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Cuando esté caliente sofríe los trozos de conejo por tandas hasta que esté bien dorado y lo reservas.
  3. Pica la cebolla y el ajo en trocitos muy pequeños (brunoise), haz lo mismo con los pimientos y la zanahoria. Ralla el tomate.
  4. En la misma olla donde has dorado el conejo echa el ajo y antes de que se dore añade la cebolla, déjala pochar a fuego lento. cuando esté bien pochada añade los pimiento y la zanahoria troceada.
  5. Una vez esté la verdura blanda incorpora el conejo, el tomate rallado, la cucharadita de azúcar, el romero, el tomillo, el laurel, el perejil, rectifica de sal y añade un poco de pimienta recién molida.
  6. Espolvorea un poco más de perejil picado y deja cocinar durante al menos un cuarto de hora (15′) moviendo de vez en cuando para que no se pegue.
Sirve caliente y con un buen pan de miga.

Curiosidades de la receta de Conejo con tomate

Ten en cuenta que si usas conejo silvestre deberás ampliar el tiempo de cocción. Puedes usar una olla exprés para que te quede bien tierno pero extrema la precaución para que no se te pegue, añade caldo o agua suficiente.

Es muy importante el dorar la carne ya que al hacerlo sellas la superficie y ayudas a que después queden más jugosas, además de que los restos que quedan en el fondo de la olla hacen que al contacto con los líquidos de las verduras formen un glaseado que es la esencia y el sabor peculiar del guiso.

Puedes usar unos farcellets en vez de añadir las ramitas de especias, son muy apañados aunque no se encuentran en todos sitios. Estos me los envió mi amiga Marycosas, una catalana con mucho arte.

Si ves que se te puede pegar añade un poco de caldo o agua. Prueba y corrige de sal cuando reduzca.

Cuando usas tomate natural has de añadir un poco de azúcar para contrarestar la acidez. Puedes usar un tomate natural triturado de calidad si te gusta mas o usar un tomate frito casero que tengas hecho y así acortar el tiempo de cocción.

Para acompañar este arroz viene ideal un poco de quinoa cocida, arroz en blanco o patatas panaderas.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Carne al toro

Carne al toro. Ternera guisada en salsa. Esta receta es de un guiso de ternera, receta típica gaditana, no hay venta que se precie sin un buen plato de este tradicional estofado de carne que tanto se ha extendido por la provincia de Cádiz.

La denominación de esta receta tiene su origen en la carne de los toros de lidia provenientes de las corridas, que al ser una carne muy dura necesitaba una cocción prolongada, hoy día se suele hacer con ternera y su nombre se utiliza como una forma de cocinar la carne, con verduras, especias y vino.

En cada casa se hace de forma diferente, con más o menos especias, con vino fino o con tinto, así es como yo siempre la he hecho. Atiende bien y no te pierdas las curiosidades donde te doy los todos los detalles de la receta y sus trucos.

 ¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de carne «al toro»

  • Un (1) kg. de carne de ternera
  • Una (1) cebolla
  • Un (1) pimiento rojo
  • Un (1) pimiento verde
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Dos (2) zanahorias
  • Tres (3) tomates (o un bote de tomate triturado)
  • 250 ml. de vino tinto
  • 100 ml. de aceite de oliva virgen extra Gil-Luna
  • Sal

Especies reunidas para carne al toro o especias de caracoles*

  • Una hoja de laurel 
  • Una (1) cucharada pequeña de pimentón dulce
  • La punta de la cuchara de pimentón picante
  • Una (1) guindilla
  • La punta de la cuchara de comino
  • Media (1/2) cucharada pequeña de orégano seco
  • Unos granos de pimienta negra
  • Un (1) clavo de olor

Elaboración de la receta de carne al toro

  1. Lava muy bien la verdura, pela la cebolla, la zanahoria y los ajos. Ralla los tomates y resérvalos en un bol.
  2. Pica los ajos, la cebolla, los pimientos rojo y verde, y las zanahorias, a mi me gusta en trocitos muy pequeños para que la salsa quede bien espesa y a la vez suave sin tener que triturar.
  3. Trocea la carne de ternera si el carnicero no lo ha hecho por ti  límpiala bien de nervios, grasas y telillas.
  4. Pon una olla a fuego medio cubriendo el fondo con aceite de oliva virgen extra, cuando el aceite esté caliente añade la carne y dórala por todos los lados. Sería conveniente que la fueses haciendo en pequeñas tandas para que se dore y no se cueza. Si ves que empieza a soltar agua o tienes el fuego muy bajo o demasiada cantidad de carne. Retira la carne de la olla una vez dorada y resérvala.
  5. En la misma olla echa otro poco de aceite de oliva, añade el ajo picado y sofríelo un minuto, antes de que empiece a dorar incorpora la cebolla, póchala bien bajando un poco el fuego. Cuando empiece a ablandar añade el pimiento y la zanahoria. Deja cocinar hasta que esté bien pochada la verdura.
  6. Añade de nuevo la carne de ternera junto con un poco de sal y todas las especias: la hoja de laurel, el pimentón dulce y picante, la guindilla, el comino, el orégano, la pimienta negra y el clavo de olor. Remueve bien para que se mezcle todo.
  7. Incorpora el vino tinto y deja reducir a fuego bajo. Cuando reduzca añade el tomate rallado, cocina unos minutos y cubre la carne con agua.
  8. Deja cocinar al menos una hora u hora y media a fuego bajo con la tapa puesta, removiendo de vez en cuando para que no se te pegue. Si ves que se queda sin líquidos puedes añadir un poco más de agua. Puede que tengas que corregir de sal.

¡ Fríe unas patatas y a comer!

Curiosidades de la receta de carne al toro

La carne de novillo o de jarrete de ternera es ideal para hacer esta receta pero cualquier otra parte te puede servir para hacer este guiso. Yo compro la carne en la Carnicería de mi amigo Paco Melero, en Vejer de la frontera, que me aconseja y me busca la mejor pieza para cada receta. Si quieres puedes hacer esta receta con carrillada, cerdo o costilla, también saldrá muy buena.
 
*Las especias reunidas para carne al toro o especias de caracoles suelen venderlas ya hechas en muchos mercados o tiendas de especias. Si quieres puedes añadir una cucharada colmada de esta mezcla de especias y evitarte el tener todas las especias que nombro en casa. A mí me gusta echar las especias enteras pero puedes molerlas en el mortero o almirez para no encontrártelas en el guiso.

Suelo usar verdura fresca pero reconozco que no todo el mundo tiene tiempo para cocinar por ello si quieres puedes usar en vez de tomates, un bote de tomate triturado o si vas mas allá un bote de tomate frito, siempre que sea de muy buena calidad, no un brick barato.

Si quieres puedes usar una olla exprés u olla rápida, cerrarla cuando añadas el agua unos cuarenta (40′) minutos y tendrás lista tu carne al toro y no te llevará tanto tiempo la elaboración de la receta.

El vino debería de ser un buen tinto con el que te tomases una copa después saboreando el plato. Yo he usado uno de aquí de Chiclana, Un Tinto de Roble de Miguel Aragón, de la Bodega Sanatorio.

Esta receta es 100% sin gluten y por lo tanto apta para Celíacos, de todos modos nunca está de más el comprobar los envases de los productos que utilices y cerciorarte que están libres de gluten, aunque la mayoría de fabricantes ya se van concienciando y se preocupan de informarnos.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.