Carrillada iberica en salsa de vino tinto

carrillera de cerdo ibericoCarrillada Ibérica en salsa de vino tinto es la receta que os enseño hoy, sigo con las Recetas Navideñas, eso no quiere decir que esta receta venga bien en cualquier momento del año sin tener que ser una fecha señalada. La carrillada o carrillera es una carne un tanto especial, se que a todo el mundo no le gusta por tener una textura algo gelatinosa, pero a quien le gusta, le apasiona. La carrillera es en la carne lo que en el pescado la cococha (kokotxa), una carne considerada casquería pero cada vez va teniendo más adeptos (por desgracia para los precios) y se encuentran fácilmente.

Esta no es una carne excesivamente cara, la ibérica un poco más pero merece la pena para unos días señalados como la Navidad. Es un guiso que debería hacerse lentamente, pero claro no siempre disponemos del tiempo que queremos y tenemos que echar mano de la olla exprés, pero si tenéis la posibilidad de hacerlo a fuego lento, no os defraudará. Si optáis por hacerlo en olla rápida, dejar reducir bien la salsa al final de la cocción.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes

  • Un (1) kg. de carrillada ibérica
  • Una (1) cebolla
  • Dos (2) puerros
  • Dos (2) zanahorias
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Una (1) ramita de romero
  • Un par (2) de ramitas de tomillo
  • Una (1) hoja de laurel
  • Un (1) clavo de olor
  • Una botella de vino tinto (3/4 L) de calidad
  • 100 ml. de caldo de pollo
  • Dos o tres cucharadas de harina
  • Una (1) cucharada de azúcar
  • Pimienta negra
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra

Elaboración

  1. Limpia bien de grasas las carrilladas, si no lo ha hecho por tí el carnicero, salpimenta bien por ambos lados y enharina ligeramente.
  2. Pela y corta a trocitos pequeños la cebolla, los puerros y las zanahorias. Resérvalos.
  3. Pon una olla o cacerola al fuego, cuando caliente la olla cubre el fondo con aceite de oliva pero no te pases o te quedará un guiso con mucha grasa.
  4. Fríe las carrilladas a fuego medio para que no se quemen y cuando las tengas con bien doraditas las reservas.
  5. En la misma cacerola echa un poco mas de aceite si hace falta y pocha las verduras hasta que estén blanditas, unos seis o siete (6 ó 7′) minutos. Los ajos los pongo enteros con su piel, dándoles un pequeño golpe con la hoja del cuchillo.
  6. En una cacerola aparte pon al fuego fuerte el vino con las ramitas de romero y tomillo. Añade también la cucharada de azúcar para contrarrestar la acidez del vino. Déjalo reducir.
  7. Cuando estén bien estofadas las verduras añade de nuevo las carrilladas con el líquido que han soltado, echa también el vino que tienes en la otra cacerola y el caldo de pollo y déjalo cocinar aproximadamente una hora y media (1,5 h.) a fuego medio, vigilándolo de vez en cuando para que no se pegue, no le falte líquido y la carne no se desmenuce por estar demasiado blanda. Corrige de sal si hiciese falta.
  8. Pasado ese tiempo, retiramos las carrilladas y si hace falta reducimos un poco más la salsa.
A la mesa, prepara pan!!
 

Curiosidades

Un truco para enharinar bien la carne y no poner todo perdido es echar las dos o tres cucharadas de harina en una bolsa de plástico, metes dentro los trozos de carne y cierras bien. Mueve enérgicamente, saca la carne sacudiendo el exceso que pueda tener de harina y la tienes lista para dorar. La bolsa y la harina la puedes deshechar sin haber manchado ningún cacharro. Ten la precaución que la bolsa no tenga fisuras o estarás perdid@.

Si no tienes caldo de pollo puedes ponerle un poco de agua y media pastilla de caldo de pollo, a mi no me suele gustar pero sé que en la cocina tradicional y nuestras madres siempre lo hacen así, de modo que tú eliges.

Cuanto mas doradas esté la carne, más oscura te saldrá la salsa, y el sabor será mas intenso al reducirla.

La salsa la podemos dejar tal cual, colarla o triturarla, como te guste mas, pero ten en cuenta que si la trituras perderás el brillo del guiso.

El vino tinto que uses que sea de calidad, siempre digo que un vino que no me bebería no lo uso para cocinar, a razón de como sea el vino así te saldrá el guiso, eso no quiere decir que con un tinto barato no salga el guiso, que también sale pero si los ingredientes son de calidad y la carrillada es ibérica no escatimes en un mal vino para una buena carne.

También puedes usas un vino blanco si te gusta mas o lo tienes a mano, o si simplemente no te gusta el sabor intenso que deja el vino tinto.

Para acompañar esta carne puedes hacer una crema o puré de patatas ligero, muy cremoso aligerandolo con caldo de pollo en vez de con leche, como si fuese una velouté o con unas patatas duquesa de mi amigo Javi Recetas, un arroz blanco también le va bien, hasta un poco de pasta combinaría pero con una buena ensalada de entrante a esta carne no le falta de nada.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Solomillo a la sidra

Ya mismo están aquí las navidades y como no, voy a intentar ir publicando una serie de recetas para estas fechas tan entrañables en las que aprovechamos para reunirnos con familiares y amigos.

Las recetas que publicaré quiero que sean sencillas, sin demasiada complicación para que cualquiera pueda elaborarlas sin problemas de encontrar algún ingrediente y con un presupuesto ajustado a los tiempos que corren, pero a la vez resultonas para que podáis sorprender a vuestros comensales. Aunque quizás publique alguna con algún punto de más para los mas sibaritas.

Para comenzar, hoy os traigo un solomillo de cerdo a la sidra, simple, sencillo y como ya he dicho ajustado a todos los bolsillos, ideal para quien no tiene mucho tiempo ¿Quién dijo que para comer bien hay que gastar mucho ?

 ¡Ponte el delantal!

Ingredientes

  • Un (1) solomillo de cerdo
  • Dos (2) dientes de  ajo
  • Una (1) botella de sidra asturiana natural
  • 200 ml. de nata
  • Pimienta blanca
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Puré de patatas o Patatas Duquesa

Elaboración

  1. Limpia el solomillo de posibles restos de grasa. Córtalo en rodajas de unos dos centímetros.
  2. Pon una sartén al fuego con un par de cucharadas de aceite de oliva y cuando esté bien caliente dora los medallones de solomillo. No los hagas demasiado para que no se te queden secos. Resérvalos.
  3. Pela los ajos y córtalos en láminas.
  4. En la misma sartén, echa otra cucharada de aceite y dora los ajos, pero no los tuestes o amargarán. Una vez dorados añade unos 20 cl. de sidra, déjala reducir unos minutos.
  5. Cuando veas que la sidra haya perdido fuerza y haya reducido a la mitad añade la nata, corrige de sal y echa un par de vueltas de molinillo de pimenta blanca.
  6. Cocina la nata y redúcela, añade los filetes para atemperarlos antes de servirlos.
  7. Acompaña con un puré de patatas o patatas duquesa*.

¡A comer!

Curiosidades

Esta receta también suelo hacerla con cava, pero en este caso he  utilizado la sidra ya que además de tener una estupenda botella por cortesía de la tienda gourmet  Universo Sibarita, me gusta poner en valor algunos de los estupendos productos que tenemos y variar un poco para no caer en la monotonía de los clásicos ingredientes. De todos modos tu puedes utilizar un cava o espumoso si no tienes sidra asturiana ya que en estas fechas es fácil encontrarlo y a un precio muy asequible.

Si quieres realzar todavía más esta receta utiliza un solomillo ibérico, le dará la categoría que merece una receta navideña y tus comensales lo agradecerán.

Para hacer el solomillo también puedes dejarlo entero, dorarlo y terminarlo de hacer metiendolo unos minutos en el horno, te quedará jugoso y exquisito.

Para la guarnición, puedes cambiar el puré de patatas por unas patatas duquesa, darán mas vistosidad al plato y están deliciosas. Para hacerlas sólo tienes que partir de la receta de puré de patatas, añadirle un una yema de huevo y mezclarlo bien. Mete en una manga pastelera con una boquilla rizada. En una placa de horno pon un papel encerado y sobre este ve formando pequeños montoncitos con la manga pastelera, pinta cuidadosamente con un huevo batido y mete en el horno a 180º unos veinte minutos para que se doren. Si todavía tienes dudas mira la receta de mi amigo Javi recetas: Patatas Duquesa.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Huevo poché con crema de patata y setas

Huevo poché con crema de patata y setas. Esta receta es una versión de la receta “huevos para romper”, de mi amigo Juan Pablo Gámez del Restaurante Los Sentidos de Linares, la cual me he permitido la osadía de hacerla a mi gusto.

La receta original son unos huevos poché con crema de patata al aceite de oliva virgen extra y colmenillas, en la que intenta representar un recuerdo gustativo de los revueltos típicos de nuestra vecina provincia de Jaén.

Las cantidades están pensadas para cuatro (4) personas.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes para la receta de huevo poché con crema de patata asada y setas

Para crema de patata asada al aceite de oliva virgen extra

  • 400 gr. de patatas
  • 100 gr. de aceite de oliva virgen extra
  • 100 gr. de nata
  • Media (1/2) cucharada pequeña de orégano
  • nuez moscada
  • pimienta blanca molida
  • sal

Para el huevo poché o escalfado

  • Cuatro (4) huevos
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal en escamas o sal de hielo
  • Pimentón de la Vera

Para las setas

  • Setas variadas (chantarelas, colmenillas, setas de cardo)
  • 125 ml. de vino Pedro Ximénez
  • Una (1) cucharada de aceite de oliva virgen extra

Elaboración de la receta de huevo poché con crema de patata asada y setas

1.- Lo primero es asar las patatas para elaborar la crema de patata y aceite de oliva, de modo que comienza lavando muy bien las patatas bajo el grifo, quitándole toda la tierra con un cepillo, deben de quedar muy limpias ya que las vamos a asar con la piel. Utiliza patatas de similar tamaño, de esta forma todas se asarán al mismo tiempo.

2.- Enciende el horno a 180º arriba y abajo, mientras tanto envuelve las patatas  individualmente en papel de aluminio, pliega bien el papel aluminio para que quede bien cerrado el paquetito. Cuando el horno tenga la temperatura adecuada, mete las patatas en la bandeja central unos cuarenta (40) minutos*.

3.- Cuando estén hechas las patatas, déjalas templar para no quemarte al pelarlas. Una vez templadas las pelas, las troceas y las pones en el vaso de la batidora con el aceite de oliva, la nata, el orégano, una vuelta de molinillo de pimientas, una pizca de nuez moscada y un poquito de sal. Batimos muy bien hasta conseguir una crema suave y muy aromática. Resérvala.

4.- Limpia bien las setas si son naturales, córtalas en trozos pequeños y en una sartén echa una cucharadita de aceite de oliva virgen extra. Saltea las setas un par de minutos y añade el vino Pedro Ximénez hasta que reduzca al menos una tercera parte.

5.- Para hacer los huevos poché o huevos escalfados, corta un trozo de papel film transparente de unos 25 cm de lado, forra un bol pequeño con este, echa unas gotas de aceite de oliva virgen extra y extiéndelo sobre el papel film. Casca un huevo en el bol forrado y  salpimiéntalo. Coge los extremos del papel film formando un paquetito y ciérralo haciendo un nudo para que no se escape el huevo. Puedes coger los extremos y ponerle una pinza de las que se le ponen a los envases para mantenerlos frescos una vez abiertos.

6.- Pon al fuego un cazo con agua hasta que esté hirviendo, baja el fuego para que hierva lentamente. Introduce los huevos unos cinco (5’) de minutos y sácalos del cazo. Tendrás que servirlo inmediatamente si no quieres que la yema se termine de cocer y se ponga dura.

7.- Para el montaje del plato, coloca la crema de patata asada en el fondo de un bol o plato hondo. Saca el huevo del papel film con mucho cuidado y lo pones sobre la crema, a su alrededor dispón las setas con su reducción de PX y espolvorea un poco de pimentón de la Vera. Unos granos de sal en escamas no le vienen nada mal.

¡A la mesa con un buen trozo de pan de campo!

Curiosidades de la receta de huevo poché con crema de patata asada y setas

*El tiempo que pongo para asar la patata es orientativo ya que depende de muchos factores como el horno, el tipo y tamaño de la patata, etc. Para comprobar que la patata esté echa, con un guante para horno o un trapo de cocina presiona la patata y si cede al apretón es que la tenemos lista.

Si tienes una Thermomix o robot de cocina te facilitará mucho el obtener la textura deseada para la crema de patata asada y podrás mantener el calor de la crema hasta servirla.

Puedes usar un aceite de oliva virgen a la trufa que le da un sabor y aroma que combina muy bien con este plato. Lo puedes cencontrar en grandes superficies,  tiendas gourmet o hacerlo tú mismo metiendo unas trufas en aceite de oliva virgen extra y dejándolas unos días para que suelten su aroma.

Las setas, si no las encuentras frescas, puedes utilizar unas buenas setas envasadas o si no tienes otra opción comprarlas congeladas. También las hay deshidratadas. En tiendas gourmet  o supermercados no tendrás problemas para encontrarlas

Los huevos no los hagas demasiado o se cuajarán por dentro y perderán la toda la gracia, para que cuando los rompas en el plato se mezcle la yema del huevo con la crema de patata y la de setas.

¡Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Croquetas de patata y cabrales

Las croquetas me pierden, hechas de lo que estén hechas, podría hacer un dosier completo de croquetas pero estas de queso cabrales son para ponerlas de las primeras ya que tienen un significado especial por la tierra de la que vienen. Asturias es un paraíso natural del cual es fácil enamorarse tanto por sus paisajes como de sus gentes y qué decir de su gastronomía… De mis visitas al principado no sólo me traje el recuerdo sino que siempre vine cargado con productos y en mis recetas se verán reflejados los platos que por allí comí.

Como tengo un precioso queso cabrales por cortesía de Universo Sibarita he pensado en hacer alguna que otra receta con este estupendo queso que ha sido galardonado como mejor queso cabrales del año 2011.

El cabrales es un queso Asturiano, amparado con denominación de origen protegida. Es un queso de tipo azul, elaborado con leche de vaca, cabra y oveja de los Picos de Europa, artesano, con un color verde azulado y casi sin corteza. Se caracteriza por su fuerte olor pero compensa su estupendo sabor.

¡Ponte el delantal!

Ingredientes

  • 350 gr. de patatas
  • Dos (2) yemas de huevo
  • 50 gr. de queso cabrales
  • 12 lonchas de bacon
  • Dos (2) cucharadas de pan rallado
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Una ramita de tomillo fresco
  • Sal

Elaboración

1.- Pon una cacerola con agua a hervir. Limpia muy bien las patatas, déjales la piel e introdúcelas en la cacerola con una cucharada de sal. Déjalas cocer unos treinta (30′) minutos.

2.- Cuando estén listas las patatas, escúrrelas y déjalas templar. Las pelas con cuidado de no quemarte y las pones en un recipiente para trabajarlas.

3.- Con un tenedor aplastamos las patatas y las trituramos hasta que queden hechas puré. En un cuenco cascamos dos huevos quitándoles de antemano las claras puesto que las yemas es lo único que necesitamos en esta receta.

4.- Batimos las yemas con un poquito de sal, sólo una pizca, se las añadimos al puré de patatas y mezclamos bien.

5.- Cortamos el queso cabrales y lo desmenuzamos en el puré de patatas, seguimos mezclando. Ahora añade las dos cucharadas de pan rallado y un poquito de tomillo fresco, mezcla muy bien y deja enfriar en el frigorífico. Con media hora (30′) tendrá suficiente.

6.- Pasada la media hora saca la mezcla. Prepárate un platito con un poco de pan rallado. Ve cogiendo pedacitos de masa para ir formando las croquetas, pásalas por el pan rallado si fuese necesario para que no se peguen.

7.- Rodea cada croqueta con una loncha de bacon y reserva.

8.- Enciende el horno, arriba y abajo a 180º. Mientras calienta el horno busca una bandeja apta para horno, pinta con unas gotas de aceite de oliva el fondo y dispón las croquetas sobre esta. Rocía un pequeño hilo de aceite de oliva sobre las croquetas.

9.- Mete la bandeja en el horno cuando esté a temperatura y aguarda unos quince (15′) minutos. Sirve las croquetas con una ramita de tomillo.

Abre una sidra natural asturiana y a disfrutar!

Curiosidades

Si tienes poco tiempo puedes poner las patatas en una olla rápida o exprés y en diez minutos estarán listas.

Prueba a añadir unos trocitos de bacon al puré de patata te quedará de categoría, proporcionando mas sabor si cabe. También puedes poner unos trocitos de huevo cocido desmenuzado.

Las claras las puedes guardar en el congelador y utilizarlas en otra receta o postre. Hay que optimizar recursos, en la cocina no se tira nada.

El queso puedes desmenuzarlo mas o menos según te guste encontrarte trocitos o que se integre bien en el puré impregnándolo todo con su sabor.

El Cabrales es un queso que se encuentra fácilmente en Asturias, en otras regiones no lo es tanto, puedes encontrarlo en grandes almacenes y tiendas gourmet.

No hay mejor maridaje para este plato que una buena sidra natural asturiana.

Espero que os guste amig@s!

Ralu

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Puré de patatas

De nuevo vuelvo con una elaboración básica para aprender cómo hacer el tan «apañao» puré de patatas. Es perfecto como acompañamiento de carnes, pollo o pescado. Con esta receta puedes hacer infinidad de elaboraciones como un pastel de puré de patatas con carne, un brazo o rollo relleno.

Su elaboración es sencilla y rápida, creo que por lo fácil que es hacerla, desecharíamos la opción de utilizar los sobres preparados que venden, aunque reconozco que hay alguno que está muy conseguido, se tarda muy poquito en hacerlo y realmente merece la pena intentarlo.

¡Pela-patatas en mano!

Ingredientes para dos personas

  • Tres (3) patatas (aproximadamente 400 gr.)
  • 50 ml. de leche
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Pimienta blanca molida
  • Nuez moscada
  • Sal

Elaboración

1.- Lava bien la patatas en agua fría y las pélalas, si no tienes mucho tiempo córtalas a trocitos, no es necesario, pero acortan el tiempo de cocción. Las patatas deben de ser todas del mismo tipo y si las cortas a trocitos, que sean más o menos del mismo tamaño.

2.- Échalas en una cacerola con agua hasta cubrirlas completamente y ponlas al fuego fuerte con la hoja de laurel y una cucharada de sal gorda.

3.- Tapa la cacerola y cuando empiece a hervir las dejas cocer unos veinte minutos (20’). También la puedes meter en una olla rápida u olla exprés cinco minutos aproximadamente.

4.- Cuando las pinches con un palillo o tenedor y compruebes que están tiernas, las retiras del fuego y las escurres. Deshecha la hoja de laurel.

5.- En la misma cacerola, que todavía está caliente, echa la leche para que se caliente, una o dos cucharadas de aceite de oliva y las patatas. Cháfalas con un tenedor o varilla y échale un poco de pimienta molida y de nuez moscada. Remueve bien hasta que se forme una pasta homogénea más o menos espesa, depende de cómo te guste o para que lo vayas a utilizar.

¡Ya tienes tu puré listo para utilizarlo en la receta que quieras!

Curiosidades

Según el tipo de patatas el tiempo de cocción aumentará o disminuirá, el tiempo que te pongo es aproximado de modo que tendrás que estar pendiente de que no se te deshagan las patatas o te queden duras.

Suelo utilizar leche entera o semidesnatada, en ningún caso leche desnatada porque quedaría aguado como si le echásemos agua. Hay quien le deja un poco de agua de la cocción y no le echa leche, pero yo le echo leche que queda muy cremoso. La cantidad de leche, siempre que no te pases, es un poco al gusto, según quieras el puré más o menos espeso y depende de para que lo vayas a utilizar, pero si te aconsejo que eches muy poco a poco la leche y así podrás ir viendo la textura y no pasarte con ella.

A veces suelo utilizar una varilla acoplada a la batidora y batir el puré, de esta forma además de ser más rápido y con poco esfuerzo, queda una textura muy suave, sin grumos y como la varilla le introduce aire queda muy esponjoso. También puedes, si tienes, pasarlo por el pasapurés.

Hay quien lo hace con mantequilla, queda muy sabroso, pero a mi me gusta echarle aceite de oliva virgen extra.

Una vez lo tengas hecho, si lo metes en una manga pastelera podrás decorar tu plato dándole un aspecto diferente, cambia de boquilla la manga y elige el dibujo que más te guste.

Espero que os sea útil!

Ralu.

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Musaka

La musaka o musaca es un pastel de berenjenas internacionalmente conocido y de origen árabe pero  realmente lo conocemos por su receta griega o de los países del este. Es parecida a la lasaña por la disposición de los alimentos en capas, pero no lleva pasta, las capas son de berenjena, patatas y carne principalmente.

La primera vez que recuerdo el haber escuchado este nombre y comer este delicioso plato creo hará unos quince años en casa de los padres de la que era mi pareja, unos estupendos cocineros y responsables en parte de «meterme el gusanillo» de la cocina.

Hoy os voy a enseñar cómo preparar una musaka con unos sencillos pasos, es fácil de preparar pero lleva un poco de tiempo el cocinar todos los ingredientes. Suelo prepararla para el fin de semana o cuando vienen amigos a casa. La pongo como plato único ya que, aunque lleva verdura, es muy contundente.

Ponte el delantal y a la cocina!

Ingredientes para cuatro (4) personas

  • 600 g. de patatas
  • 250 gr. de carne de ternera picada
  • 250 gr. de carne de cerdo picada
  • Dos (2) berenjenas
  • Una (1) cebolla
  • Tres (3) tomates maduros.
  • Dos (2) dientes de ajos
  • Pimienta molida
  • Canela en rama
  • Azúcar
  • 125 ml. de vino fino
  • Mantequilla
  • 1 l. de Salsa bechamel
  • Queso curado

Elaboración

1.- Pela, lava bien y pica la cebolla en trocitos muy pequeños (brunoise). Haz lo mismo con los ajos. Si tienes un triturador de ajos no estaría de más que le dieses uso, pela los ajos y trituralos, darán todo su sabor y se desharán en el sofrito.

2.- Pon una sartén a fuego medio y echa los ajos picados/ triturados, cuando tomen color, antes de que se doren, añade la cebolla y una pizca de sal para que se vaya ablandando, la dejamos pochar hasta que esté transparente y tierna.

3.- Mientras tanto lava la berenjena y córtala en rodajas. Colócalas en una fuente con un poco de sal por encima para que pierdan agua y quitarle algo de amargor.

4.- Echa la carne a la sartén donde tienes la cebolla, añade un poco de sal, media cucharadita de orégano, un par de vueltas del molinillo de pimienta y un trozo de canela en rama. Remueve bien para deshacer la carne y que se sofría bien.

5.- Lava y escurre las berenjenas, sécalas bien con papel absorbente. Enciende la plancha o pon una sartén al fuego y con una cucharada de aceite de oliva saltea las berenjenas. Las vas reservando sobe un papel de cocina. No tienes que hacerlas demasiado ya que se terminarán de hacer en el horno.

6.- Corta las patatas en rodajas no muy delgadas y las fríes con aceite de oliva a baja temperatura (unos 135º), también las reservas sobre un papel absorbente. Las patatas no deben de quedar doradas, tienen que quedar pochadas y tiernas.

7.- Parte el tomate lavado y rállalo con un rallador, incorporalo a la sartén con la carne, remueve bien y echa una cucharada de azúcar para quitarle la ácidez. Tapa y déjalo sofreír unos veinte (20’) minutos. Lo apagas y lo reservas.

8.- Prepara una bechamel como ya te he enseñado en la anterior receta. Si no te acuerdas, pincha este enlace donde te lo explico detalladamente: “Bechamel”.

9.- Para montar la musaka, engrasa con un poco de mantequilla una fuente para el horno. Cubre el fondo con una capa de patatas, sobre esta pon una capa del sofrito de carne y a continuación una capa con las berenjenas. De nuevo ponemos otra capa del sofrito y la cubrimos con la bechamel.

10.- Rallamos el queso curado sobre la bechamel y un poco de pimienta blanca.

11.- Enciende el horno arriba y abajo a 180º. Mete la fuente con la musaca en el horno unos diez (10’) minutos, ahora pon el horno sólo por arriba para gratinarlo. Cuando esté dorado el queso apagamos el horno y con cuidado de no quemarnos sacamos la fuente del horno.

A la mesa con un buen trozo de pan!!

Curiosidades

Según la recetas originales la carne utilizada para este plato es la de cordero o en todo caso la ternera. Yo utilizo mezcla de ternera y cerdo por ser mas jugosa y menos seca que la ternera. La carne de cordero no gusta a todo el mundo de modo que elige la que más te guste.

Puedes tener la bechamel preparada de antes o hacerla en un santiamén cuando tengas montada la musaka. Recuerda taparla con papel film para que no se forme una costra en la superfície.

Para gratinar la musaka añádele el queso que mas te guste. Un grana padano, un parmesano, un buen queso manchego o un queso Payoyo de la Sierra gaditana. El queso Payoyo es un queso artesanal que se produce en Villaluenga del Rosario, el pueblo más allto de la provincia de Cádiz, en la Sierra de Grazalema, Reserva de la Biosfera. Se elabora con leche de cabra payoya, de ahí su nombre. Tiene premios a nivel regional, nacional y mundial, lo clasifican entre los diez mejores quesos españoles.

Puedes servir la musaca cortandola en porciones con un cortapastas o aro de emplatar, de este modo te quedará muy presentable a la mesa y deslumbrarás a los comensales.

Ralu

Nota: El autor no tiene ninguna relación comercial o de otra índole con “Quesos Payoyo”, este enlace es puramente informativo.

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.

Bacalao dorado

Bacalao dorado. El bacalao dorado es de origen portugués, donde es muy popular, pero muy conocido en nuestra tierra, sobre todo en los pueblos fronterizos. También llamada Bacalao a bras en zonas alejadas de la frontera de España. Es de las recetas más famosas de la cocina portuguesa.

Esta receta aunque es de pescado suele gustar hasta a quien no le hace demasiada gracia el pescado o no les gusta el sabor fuerte del pescado. Es muy fácil  y rápido de hacer, os lo aseguro.

Este bacalao no es más que una especie de revuelto al que cada uno le da su toque especial. Tiene un sinfín de elaboraciones y varían los ingredientes según la zona donde se haga pero siempre se mantiene el bacalao, el huevo y las patatas, yo la hago de esta forma.

Ingredientes de la receta de bacalao dorado

  • 250 gr. de bacalao desmigado y desalado
  • Una (1) cebolla pequeña (100 gr. Aproximadamente)
  • Dos (2) dientes de ajo
  • Cuatro (4) patatas medianas
  • Cuatro (4) Huevos
  • Dos (2) cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • Un (1) manojito de perejil fresco
  • Sal
  • Pimienta negra

Elaboración de la receta de bacalao dorado

1.- Pela las patatas y lávalas bien. Córtalas muy finas tipo patatas paja, puedes ayudarte de una mandolina para hacerlas muy finas si no tienes pericia con el cuchillo. Lávalas de nuevo para quitarle la fécula de modo que no se pegarán demasiado cuando las frías y quedarán sueltecitas. Fríelas y resérvalas con un papel absorbente para quitarles el exceso de aceite.

2.- Corta la cebolla en trocitos muy pequeños. Puedes cortarla también en láminas pero a mí me gusta más cortarla muy pequeñita para que no le quite protagonismo al bacalao.

3.-El bacalao debes tenerlo ya desalado así que sólo tienes que desmigarlo con las manos (mira en «curiosidades»).

4.- En una sartén pon las dos cucharadas de aceite de oliva, ponla a fuego medio. Échale los dos dientes de ajo sin pelar, sólo con un golpe para romperlos un poco. Cuando estén dorados añade la cebolla, que se vaya pochando. Antes de que se empiece a dorar añade el bacalao y lo rehógalo hasta que haya perdido el agua que suelte. En este paso puedes retirar los ajos si no te gusta encontrártelos enteros mas tarde.

5.- Inmediatamente añade las patatas fritas y justo después los huevos. Remueve bien para que cuajen los huevos y retira del fuego. Me gusta retirarlo antes de que cuaje totalmente el huevo ya que se termina de cuajar con el calor residual, así queda muy jugoso, pero si te gusta el huevo mas cuajado sólo tienes que retirarlo del fuego cuando te guste.

6.- Pruébalo de sal y añádele si le hace falta. En esta receta tienes que tener cuidado con la sal ya que el bacalao de por si es salado de modo que aconsejo probarlo al final y si le hace falta rectifícalo.

7.- Muele un poco de pimienta negra por encima y rocía con perejil picado.

A la mesa calentito!

Curiosidades de la receta de bacalao dorado

Uno de los puntos importantes de esta receta es que las patatas sean “paja” o sea muy finas, como digo en el punto uno puedes cortarlas con una mandolina, que no es más que una maquinita que nos facilita la labor de cortar verduras entre otras cosas, o cortarlas con el cuchillo, primero a rodajas muy finas y después esas rodajas en bastones muy finitos. Al freírlas se dorarán y quedarán crujientes. La mandolina la puedes encontrar en grandes almacenes o en tiendas especializadas en utensilios de cocina como puede ser «Bazar Victoria» en Sevilla donde también tienen compra on line.

El bacalao es necesario desalarlo, para ello debes meterlo en agua al menos 12 horas antes de elaborar la receta e ir cambiándole el agua cada cuatro u seis horas. Si no tienes tiempo o simplemente no te apetece desalarlo puedes comprar unos envases de bacalao desalado en tu supermercado habitual, suele ser más barato que comprar un lomo y muy apañado si vas con prisas.

Hay quien antes de echar el huevo lo bate, a mi me gusta echarlo entero y romperlo al mezclarlo con las patatas y el bacalao. Ten la precaución de cascar el huevo fuera del recipiente donde lo cocinas para que no caigan trozos de la cascara en la que se encuentran los gérmenes de la salmonelosis. Te aconsejo que casques el huevo sobre la encimera de la cocina o la tabla de cortar, lo pongas en un cuenco y después lo eches sobre la sartén.

¡Buen provecho!

Ralu

Nota: El autor no tiene ninguna relación comercial o de otra índole con «Bazar Victoria», este enlace es puramente informativo.

PD: Todo el contenido y fotografías están bajo una licencia.